TRIUNFO QUE VALE | El Real Madrid supo aguantar el chaparrón en El Alcoraz
Por Estefanía Ramos
La lluvia hizo presencia en El Alcoraz y el Real Madrid aguantó el chaparrón, el que le caía el cielo y el que le estaba metiendo el Huesca en el campo. El equipo de Pacheta salió a por todas y en tres minutos tuvo tres ocasiones claras para ponerse por delante en el marcador. El inicio gris del Madrid recordaba a tantos partidos donde los de Zidane tiraban la primera parte y acaban sucumbiendo ante el rival pero esta vez consiguieron aguantar y el asedio del Huesca acabó a los 10 minutos. Kroos y Modric se impusieron en el centro del campo y comenzó el dominio del Real Madrid.
El conjunto blanco conseguido hacer su primera tarea, llevar el partido a su terreno pero aún quedaba lo más difícil, la tarea pendiente de este equipo: el gol. El Madrid se adueñó del balón y salvo alguna contra aislada del Huesca no lo soltaron hasta que el árbitro pitó el descanso. Pero tanta posesión no se tradujo ni en peligro ni en ocasiones ni en nada. Y con esa nada se llegó al descanso. Zidane miraba a su banquillo en el que sólo estaban Mariano y Marcelo, los porteros Lunin y Altube y los canteranos Marvin y Víctor Chust. Los once de siempre, los once que estaban en el campo iban a tener que ser los que sacaran el partido adelante.
En la segunda mitad el guion se volvió a repetir pero con distinto final. El Madrid saltó dormido al terreno de juego y a los dos minutos Javi Galán adelantó al Huesca y no fue ninguna sorpresa. Pero ese gol le tocó el orgullo a los hombres de Zidane que lejos de bajar los brazos como han hecho tantas y tantas veces se lanzaron a por el empate. Benzema demostró que tiene un guante para poner el balón y estrelló la pelota en el larguero para que Varane cazase el rechace y enviase el balón al fondo de la red. La conexión francesa le daba la vida al Madrid. Con un jugador que lancé las faltas de forma tan magistral y otro que sea potente en el juego aéreo el equipo puede tener ahí su mejor arma.
Con el paso de los minutos el cansancio fue apareciendo ambos equipos y el partido se fue rompiendo, bueno para el Madrid. Bueno hasta que Odriozola tuvo que abandonar el terreno de juego entre calambres y entró en su lugar Marcelo. Y con el partido descontrolado y sin dueño el brasileño mostró sus mejores virtudes en ataque, lo de defender ya lo dejamos para otro día. En un intercambio de golpes el equipo de mayor calidad se acabó imponiendo y todas esas ocasiones que se crearon en los primeros 45 minutos acabaron apareciendo. Y el que volvió a aparecer fue Raphaël Varane en el minuto 84 para aprovechar otro rechace, en este caso de Casemiro tras una falta sacado por Toni Kroos, para rematar a placer y poner el 1-2 definitivo.
El Madrid se acabó imponiendo por calidad pero a este equipo le sigue faltando pegada y le sobran ocasiones en contra. En menos de tres semanas viene el Atalanta, como no consigan poner remedio a los desajustes defensivos la eliminatoria puede ser un festival de goles para los italianos. Courtois es la esperanza, como hoy y como siempre.
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