"Pancho" Martínez, ayudante de Maradona en Dorados: la vida solitaria del "10" y su sueño trunco de dirigir a Boca

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TOPSHOT-FBL-MEX-DORADOS-JUAREZ-MARADONA - Maradona fue feliz en Dorados. / RASHIDE FRIAS/Getty Images
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Antes de retornar a la Argentina para dirigir a Gimnasia (LP), en lo que fue su última experiencia como entrenador antes de su fallecimiento el 25 de noviembre de 2020, el astro Diego Armando Maradona dirigió a Dorados de México entre 2018 y 2019, quedando al borde de lograr el ascenso a Primera.

José María Martínez fue uno de sus ayudantes en su última etapa en el club de Culiacán, colaborando desde enero hasta junio de 2019, y en diálogo con Infobae "Pancho" decidió romper el silencio y contar intimidades del "10" campeón del mundo con el seleccionado Albiceleste en el Mundial de México 1986.

“A Diego lo tengo presente, sigue estando a mi lado. Lamentablemente,su vida fue muy solitaria, porque nunca pudo tener una vida normal como la nuestra. No pensé que su final iba a ser así de drástico”, se lamentó el ex entrenador del Quilmes Atlético Club, quien actualmente está a cargo del San Luis de Quillota, en Chile.

"La vida me regaló estar al lado del más grande de todos los tiempos. Disfrutar no solo del fútbol, sino de conocerlo y ser una parte pequeña de su historia. Le agradezco a la pelota que nos lleva a lugares inimaginables y me puso al lado de Dios. Fui inmensamente feliz. La tristeza que tengo es producto de lo que él representaba", continuó Martínez.

A pesar de ser una de las personas más reconocidas a nivel mundial, "Pancho" destacó la humildad y simpleza con la que Maradona salía a hacer tareas diarias, como comprar en un supermercado: "Era feliz con muy poco. Recuerdo que un día llegó feliz al entrenamiento en Culiacán con dos bolsas del supermercado, una en cada mano. En una traía shampoo, en la otra, desodorantes. Y nos dijo: “Fui al súper porque ustedes no compran, ja”. Ahí vi una persona que, haciendo mandados, algo que para el resto es un tema rutinario, fue feliz, incluso compartiendo ese momento que extrañaba o necesitaba en su vida", agregó.

Por último, el nacido en Chivilcoy confesó que el último sueño de Diego era poder dirigir a Boca Juniors, club del que era fanático:  "Sí, me lo dijo, su sueño era dirigir a Boca. Su corazoncito era muy bostero, una cosa increíble. Diego era auténtico y decía lo que pensaba. No tenía contradicciones, era siempre el mismo e incapaz de pedir algo, porque se construyó en la adversidad y resolvió todo sólo. De alguna forma necesitaba y deseaba dirigir en la Argentina, pero tenía miedo de cómo lo iban a tratar", culminó. Una lástima...