Maradona, Dios en Nápoles: así se fraguó su llegada y su impacto en la historia del club

Diego Maradona
Diego Maradona / Etsuo Hara/GettyImages
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Sí. Antes de la llegada de Diego Armando Maradona, el Nápoles ya existía. El Pelusa tenía su vida y probablemente no supiera mucho del club. La historia de Maradona y el Nápoles es una historia de amor. De dos corazones 'ciegos' que se unieron para siempre el uno con el otro tras el fichaje del astro argentino por el conjunto del sur de Italia.

Una leyenda, una gesta, que comenzó el 5 de julio del año 1984. Es en esa fecha cuando el Nápoles hizo oficial el fichaje de un futbolista que había llegado como promesa a Barcelona, pero que no había terminado de arrancar. Una fecha que es un antes y un después no sólo en la historia de un club que cambió para siempre, sino también en el de una ciudad.

Nápoles antes de Maradona

El panorama en Nápoles antes de la llegada del Pelusa era desolador. El propio Diego lo asegura en su biografía: "Cuando llegué me enteré de que había estado peleando por no descender a la Serie B. Desde luego, el nivel de la plantilla era de Serie B". No es una exageración. Es lo que realmente todos aseguran que había en el Nápoles en el verano de 1984.

Los hechos así lo verifican. En la temporada 1982/83, los azzurri se habían salvado por apenas 2 puntos del 'infierno'. Tuvieron un cambio de entrenador a mitad de temporada, Pesaola por Giacomini. Al curso siguiente les fue de menos incluso, ya que acabaron la temporada 1983/84 con 26 puntos por los 25 del descendido Genoa. Santin y Marchesi fueron sus entrenadores.

El 'efecto Maradona' evidentemente fue más allá de lo meramente deportivo. Era un boom mediático para el club que presidía Ferlaino. Todo giraba en torno al Pelusa, que en sus dos primeros años puso a los partenopeos en el octavo y el tercer puesto de la Serie A respectivamente. El 'pelotazo' lo dieron en 1987, con el primer Scudetto de su historia.

Maradona antes del Nápoles

Lo cierto es que la llegada de Maradona al Nápoles pudo haberse producido mucho antes. En 1978, Settimo Aloisio era el entrenador de Argentinos Juniors, equipo donde estaba Diego con apenas 18 años. Aloisio convenció a Gianni di Marzio, técnico del Nápoles, para que lo firmara. El problema es que hasta 1980 no se podían incorporar jugadores extranjeros en la liga italiana.

En Argentinos Juniors estuvo 4 años, marcó 116 goles en 166 partidos, y ganó dos Balones de Oro sudamericanos. Pasó dos años turbulentos en Boca Juniors, equipo que tenía muchas dificultades para pagar al 'Pibe de Oro', y en 1982 dio el salto definitivo a Europa.

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Maradona en el Barcelona / JOEL ROBINE/GettyImages

Un salto que dio de la mano del Barcelona. Las lesiones y enfermedades tuvieron a Maradona mucho tiempo de baja, y sólo pudo demostrar su tremendo nivel en pequeñas dosis. Dos temporadas deleitó el Pelusa a los azulgrana, en las que disputó 58 partidos y marcó 38 goles. Además, se proclamó campeón de liga y de la Copa del Rey.

El fichaje de Maradona por el Nápoles

La llegada de Diego se estuvo fraguando desde marzo. Al final, Ferlaino consiguió traerlo al Nápoles por 13.000 millones de liras, en el que en ese momento era el fichaje más caro de la historia del fútbol. Un fichaje que, a la postre, se convertiría poco menos que en la llegada de un Dios, de un Mesías al club. Le dio la vuelta a su historia por completo.

El día de la presentación en San Paolo, había mejor ambiente que durante los partidos. 50.000 espectadores abarrotaron sus gradas y se morían por abrazarse a quien llegó (y se convertiría) como un ídolo absoluto. El fichaje de Maradona devolvió la ilusión a una afición entera, que venía de pasar penurias futbolísticas en los años anteriores

Antes del mito, todo estaba preparado para ello: "Maradona llegó a Nápoles a las 17.20 horas a bordo de un Range Rover acompañado por su abogado Cysterz Piller, los dos operadores de televisión personales del jugador y los dos directivos del Napoli que realizaron la operación de traspaso. ", anunció Ansa.

Canciones, muros, obras de arte,... hasta los platos de los restaurantes querían honrar al Diego. Maradona se entregó a ese recibimiento que le dio toda la ciudad de Nápoles: "Buenas noches napolitanos, estoy feliz de estar con ustedes. Forza Napoli" fueron sus primeras palabras. Una premonición del idilio que vivirían después.

El impacto de Maradona en el Nápoles: del abismo al Scudetto

Ya hemos visto el 'pretexto' en el que estaban tanto el Nápoles como Maradona antes de unir sus caminos. Lo cierto es que Diego fue quien construyó la plantilla a lo largo de los siguientes años. Su impacto fue bestial, hasta lograr en apenas tres años el histórico primer Sucdetto de la historia de club al que hacíamos mención antes.

Diego Maradona
Diego Maradona / Etsuo Hara/GettyImages

La primera temporada fue de mejoría. El Nápoles venía de rozar el descenso y terminaron octavos, aunque fuera de Europa. Maradona jugó 36 partidos y anotó 17 goles en todas las competiciones. El salto en el curso 1985-86 fue más importante: acabaron terceros y se clasificaron para la Copa de la UEFA, a las órdenes de Rino Marchesi.

La 'obra de Dios' se completó en la temporada 1986-87. El Nápoles había pasado en apenas 3 años de estar a punto de descender a lograr el primer Scudetto de su historia. Aparte, ese curso lograron la Coppa. Un destino al que estaba abocado el club partenopeo desde 1984. Desde el momento en el que recibieron a Diego Armando Maradona como a un Mesías. El argentino se encargó de convertirse en ello con el paso de los años.