Los cuatro aciertos y el error del Real Madrid en su victoria contra el Liverpool (3-1)
Por Pablo Falcones
El Real Madrid coge ventaja en los cuartos de final de la Champions League después de jugar muy bien y lograr una gran victoria hoy ante el Liverpool (3-1). Estos han sido los cuatro aciertos y el fallo del equipo de Zidane:
ACIERTOS
Primera parte primorosa del Real Madrid, basada en la presión
Los primeros 45 minutos que jugó el conjunto blanco son para ponerlos en las escuelas. La disposición táctica y la presión organizada asfixiaron al Liverpool, al que la pelota le duraba muy poco y no podía hilar jugadas de ataque. De esa presión también llegaron los fallos reds
Ha llegado en buen momento el equipo de Zidane a este tramo del año, y hoy lo plasmó. Hizo un fútbol total tanto ofensivo como defensivo y además encontró el premio del gol en dos ocasiones, de manera más que merecida, gracias a Vinicius y Asensio. Lo dicho, para ponerlo en las escuelas.
Vinicius, en modo crack
Todos los ojos estaban en Vinicius, el elegido por Zidane en un día tan importante tras la ausencia de Hazard. Lo cierto es que hoy hizo el mejor partido en sus casi tres años en el Real Madrid y dio un golpe encima de la mesa
Como siempre lo intentó por la izquierda, pero esta vez además estuvo fino. Su control y definición en el 1-0 fueron geniales, y anduvo muy espabilado en el 3-1. Además le dio un buen 'dolor de cabeza' a Arnold, que debió acabar harto de él. Simplemente espectacular.
Militao 'reivindicao'
Si para Vinicius era un día clave, no era menos para el ex jugador del Oporto. Quería ponerlos a los dos en el mismo punto, pero lo de 'Vini' merecía un apartado propio. Hoy Militao estuvo a la altura ante uno de los ataques más peligrosos de Europa.
En la primera parte no hizo ni una sola concesión ni a Salah ni a Mané, y en la segunda apretó a la par que lo hacía el equipo de Klopp. Gracias a su gran actuación, nadie echó de menos a Ramos ni a un Varane al que ha tenido que sustituir a última hora. Es un jugador de días grandes.
Derroche físico en el momento más duro
El Liverpool subió el nivel físico y la velocidad en la segunda parte. Era uno de los fuertes de los reds, y el Real Madrid respondió. A pesar del gol de Salah, y de tener un momento de mayor exigencia, todo el equipo se sobrepuso a la perfección.
El centro del campo blanco fue el mejor ejemplo de ello. Casemiro fue una roca y Modric no agotaba su gasolina, pero es que en defensa Miliato y Mendy eran dos auténticos muros. Cuando el partido entró en un territorio más 'Liverpool', los blancos hicieron un ejercicio clave de mantener la compostura.
FALLO
El equipo sufrió al comienzo de la segunda parte
Tras verse muy superado antes del descanso, la arenga de Klopp funcionó en el vestuario. Gracias a meter a un Thiago por el que pasaba el juego de los ingleses, salieron con un par de marchas más después del intermedio
La vertiginosidad típica de este equipo salió a relucir, y Salah aprovechó una jugada embarullada para recortar distancias. Con centros desde la derecha y la irrupción de Diogo Jota, pusieron en apuros en más de una ocasión a Courtois, hasta que apareció de nuevo Vinicius.