Cinco jugadores argentinos que experimentaron un bajón fuerte en sus carreras
1. Luciano Vietto
Muy lejana en el tiempo quedó aquella inolvidable temporada 2014/15 con la camiseta de Villarreal en la que marcó 12 goles en la Liga española y que le valió una oportunidad en el Atlético de Madrid de Simeone. El delantero formado en Racing no logró sostener esas performances y tras dos años en el Aleti donde jugó poco y nada, comenzó a ser cedido, primero a Sevilla y luego a Valencia.
El presente lo encuentra en el Fulham inglés, lejos de su mejor versión.
2. Matías Kranevitter
Después de ser campeón de la Libertadores con River y de ser considerado como el sucesor de Mascherano en la Selección Argentina, al volante central le costó su adaptación al fútbol europeo. En el Atlético de Madrid jugó poco y nada y en Sevilla no fue muy distinta su situación. Hoy se encuentra en el Zenit de Rusia, en una liga poco competitiva para un jugador de elite.
3. Ricardo Álvarez
Parece increíble que este buen volante surgido en Vélez haya sido parte del plantel argentino que llegó a la final del Mundial 2014. Por aquel entonces Ricky se destacaba en Inter y no estaba lejos de aquel nivel que le permitió dar el salto a Europa. Sin embargo, tras la Copa pasó a Sunderland y poco a poco fue desapareciendo del radar, Tras otro ciclo en el Calcio con Sampdoria, hoy se encuentra en el Atlas mexicano.
4. Matías Defederico
En el Clausura 2009 que Huracán pelearía hasta la última fecha con Vélez, Defederico fue la gran figura del equipo junto a Javier Pastore. Un delantero desequilibrante, veloz y con mucho gol. Durante esa etapa incluso llegó a ser convocado por Maradona para la Selección local.
En 2009 pasó al Corinthians y allí comenzaría el declive. En Brasil le dieron la 10, pero no tardaron en darse cuenta que le quedaba grande. Lo mismo pasó en Independiente al año siguiente. Volvió a Huracán en 2012 y muy lejos estuvo de repetir lo hecho 3 años antes.
Desde entonces pasó por clubes menores de varios países hasta su presente en el Apollon Smyrnis de Grecia.
5. Cristian Pavón
Un caso emblemático. El 7 de Boca pasó de ser el jugador más desequilibrante del fútbol argentino, un indiscutido en la Selección (se ganó merecidamente su lugar en Rusia 2018) y de estar cotizado en cifras astronómicas a generar murmullo por parte de sus propios hinchas. Pavón parece haberse vuelto a poner el "balde" en la cabeza.