Todo Barcelona celebra el regreso del mejor Coutinho
Por Adrían Marcos
El pasado domingo el silencio de las gradas vacías del Camp Nou se vio interrumpido por el estruendo de los fuegos artificiales y cohetes que sobrevolaron el cielo de la Ciudad Condal como punto final a unas extrañas fiestas de la Mercè. La noche acompañaba a la celebración al ritmo de los goles de un FC Barcelona que se estrenó en LaLiga de la mejor manera posible, con Ansu Fati como estrella, Leo Messi ejerciendo de capitán y Philippe Coutinho regresando por todo lo alto.
La actuación del centrocampista brasileño quedó ensombrecida por el doblete del chaval, que al igual que los cohetes comienza a despegar en una carrera que, si no se trunca, le puede llevar a alcanzar el cielo para situarle junto a las grandes estrellas del fútbol mundial. Ansu Fati volvió a marcar ante el Celta de Vigo, pero ayer su tanto no fue suficiente para evitar que Coutinho fuese el que hoy centre la mayoría de las miradas.
El carioca fue el mejor del partido en Balaídos con su asistencia en el primer gol, el pase que terminó suponiendo el segundo, dos disparos que se encontraron con el palo y el portero rival, y un despliegue de fútbol que recordó al futbolista que encandiló al mundo en el Liverpool. Coutinho, que hace un par de años habría sido el sustituido sin lugar a dudas tras la expulsión, se encargó de mover a este nuevo FC Barcelona de Ronald Koeman para crecerse ante la inferioridad.
Su Erasmus en Alemania, pero sobre todo la llegada del neerlandés al banquillo blaugrana, le han sentado muy bien al brasileño, que es un jugador muy distinto del que se marchó hace más de un año. Aquel futbolista apagado, fuera de lugar y falto de motivación alguna se ha convertido en el más activo del equipo con un esquema que parece diseñado para él. La apuesta de Koeman por el mediapunta es evidente y la respuesta del futbolista en estos dos partidos es más que positiva.
Frente al Celta de Vigo, al igual que ante el Villarreal, Coutinho se encargó de mover al equipo desde su posición y hacer verticalizar el juego con sus caídas a banda, sobre todo a la izquierda, asociarse con Frenkie de Jong, Jordi Alba y Ansu Fati, y buscar una posición propicia para mirar a portería. También apareció varios metros más atrás, en la zona de creación, para liberar al neerlandés y apareció entre líneas para convertirse en la alternativa más buscada por sus compañeros.
Además, el buen momento de Coutinho, junto al del resto de los ya habituales para Koeman, ha logrado reducir esa 'Messi-dependencia' que llevaba sufriendo el FC Barcelona durante los últimos dos años. El argentino puede permitirse el lujo de pasar más desapercibido y no ser siempre el que tira del carro al tiempo que el brasileño junto a De Jong y Ansu Fati vuelcan el juego por la banda contraria consiguiendo siempre un resultado exitoso.
Y con todo esto el cuadro blaugrana enlaza dos partidos consecutivos con victoria y afronta el duelo frente al Sevilla con una imagen muy diferente de la esperada tras la debacle en Lisboa y el caótico verano. Un cambio reflejado claramente en la figura del brasileño, que ha cambiado las caras largas por sonrisas al encontrar por fin su sitio en el Barça. No sería extraño que este domingo en la Ciudad Condal se escuchasen de nuevo los cohetes, pero por la celebración del regreso del mejor Coutinho.