Ter Stegen y la conexión Messi-Alba las claves de la victoria del Barcelona
Pasarán los años y llegarán nuevos futbolistas, pasará el tiempo y ambos dejarán este deporte, pero la conexión entre Jordi Alba y Messi no tiene fecha de caducidad. El primer gol del partido, marca de la casa, ha sido creado por una genialidad de Messi que otorgó a su compañero el balón en una posición muy cómoda pero algo escorada. Jordi Alba se encargó de engañarnos a todos y colar por la escuadra un latigazo imparable.
Todos los entrenadores de La Liga advierten a sus equipos que tengan vigilados a ambos, es decir, que cuando Jordi Alba reciba el balón, vigilen los movimientos del astro argentino y cuando sea Leo el que conduce la pelota fijen sus miradas en las internadas del lateral catalán. Sin embargo el conocimiento de lo que puede pasar no es suficiente para frenar a estos dos. Todos saben cuál es la idea de Messi, en este caso buscar a Jordi Alba, pero la calidad se impone por encima del conocimiento y por mucho que intenten impedir que se junten estos dos genios acaban por conseguirlo.
La otra parte de la ecuación es la seguridad bajo palos del guardameta alemán. En la primera mitad detuvo dos balones que a cualquier otro se le podrían haber complicado, y mucho. El primero de ellos fue un zurdazo de Kike Barja que sacó a mano cambiada cuando el balón ya parecía acariciar la red. Su segunda intervención fue una buena parada en un mano a mano que se creó el propio Ruben García con un control exquisito.
Realmente no es solo su habilidad con las manos la que le hace ser un jugador indispensable en este Barça, sino su capacidad para sacar el balón jugado como un defensa más. Si el equipo rival formado por once jugadores, está presionando a todos y cada uno de los jugadores del Barça nadie puede intentar poner nervioso a Ter Stegen. La mayoría de equipos caen en la trampa e intentan lograr que el portero tenga un fallo con el balón dejando así libre de marca a un jugador atacante. Esto sería una situación normal en cualquier equipo, pero no en el Barça porque Ter Stegen es capaz de jugar el balón como un centrocampista más.