Sin recambio para Messi: el primer fracaso de la etapa Laporta 2.0
Sin recambio para Messi: el primer fracaso de la etapa Laporta 2.0
Joan Laporta llegó a la presidencia viviendo de sus propias rentas, de la creación del Barcelona de Rijkaard, Ronaldinho, Eto’o y Deco y del conjunto de la Masia y Pep Guardiola. No hizo ninguna promesa electoral salvo intentar hasta el final la renovación de Messi. Aseguró que era demasiado pronto y que hasta que no se asentara en el club no podría dar nombres de futuros jugadores. Ahora conocemos la verdadera razón: esos nombres no existían. A falta de unas horas para el cierre de mercado, el Barcelona ha perdido a Messi y no ha fichado ningún jugador para sustituirle.
Joan Laporta ha fracasado en su primer mercado de fichajes al frente del club blaugrana. El único jugador que ha llegado por su gestión es el Kun Agüero, y si lo ficharon fue para tratar de retener a Messi en el Camp Nou. Objetivo no conseguido. Eric García y Memphis Depay ya estaban pactados en la época de Bartomeu, Laporta y su junta solo tuvieron que seguir el plan ya trazado. Wijnaldum era el tercero en cuestión, pero el PSG se adelantó y al neerlandés, como a Messi, no le han encontrado remplazo. Los sueños barcelonistas duermen en París.
El Barcelona jugará esta campaña debilitado, con una plantilla de urgencias y con la necesidad de que Koeman utilice a futbolistas de la cantera. Dos jugadores programados en el proyecto no han llegado y tampoco han fichado a otro futbolista para que le sustituya. Para colmo, los jugadores que sí estaban en la lista de descartados, se quedan. Umtiti seguirá y Pjanic está cada vez más lejos de volver a la Juventus.
Un año más, Koeman seguirá siendo criticado mientras busca trucos de magia para hacer brillar y pelear por títulos a una plantilla en declive, con futbolistas descontentos y con falta de alternativas. Este año, además, con la dificultad añadida de haber perdido a Lionel Messi y no haber encontrado ningún futbolista con el carácter necesario para ser el líder en la línea ofensiva. Continúas las vacas flacas. El Barcelona se sumerge, todavía más, en su profunda crisis.