Si hay un jugador que merece ser campeón de Liga MX antes de retirarse, ese es José de Jesús Corona

Si hay un jugador que merece ser campeón de la Liga MX antes de colgar los guantes, ese es José de Jesús Corona, quien lamentablemente no ha podido consolidar sus grandes torneos bajo los tres postes, perdiendo varias finales, primero lo hizo con Tecos UAG en el Clausura 2005 y posteriormente con Cruz Azul en tres ocasiones, sin saberse si realmente son ciertas las versiones de que el club recibía dinero por perder las finales.

Chuy es uno de los jugadores que no ha sido perseguido continuamente por el éxito cómo se debe, pues tiempo después de ser subcampeón con los Tecolotes, en el 2009 se le ofreció una oferta por parte de Tigres para convertirse en su nuevo cancerbero, sin embargo, rechazó la opción porque al mismo tiempo se le presentó una por parte de La Máquina, aceptando la segunda y pensando que si un club podía alzar títulos, iba a ser uno de los cuatro ‘grandes’ del fútbol mexicano, grave error, ya que desde ese entonces los felinos se hicieron de cinco Ligas, aunque pudieron ser más.

Asimismo, el formado en Atlas tampoco ha corrido con la mejor de las suertes a nivel internacional, pues salvo la medalla de oro conseguida en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, debe tener una espina clavada por haber acudido a tres mundiales y jamás haber disputado un duelo, teniendo un récord poco digno de presumir al ser el futbolista al que más Copas del Mundo acudió sin ver minutos, siendo la vez más cercana en Alemania 2006 cuando el padre de Oswaldo Sánchez falleció días antes del debut de la selección mexicana, pero al final San Oswaldo volvió a tiempo.

Para Sudáfrica 2010, quedó excluido de la lista, mientras en Brasil 2014 y Rusia 2018 tuvo que conformarse con estar en la banca viendo a Guillermo Ochoa atajar y ahora, ya ni siquiera entra en planes del técnico argentino Gerardo Martino, cerrando así su historia con el Tricolor. Y aún cuando no pudo ver acción en los Mundiales, sí pudo participar en la Copa FIFA Confederaciones, Copa América y Copa Oro, sin poder ser campeón en ninguna donde fungió como titular.

Todos estos datos demuestran el nivel regular que ha mantenido Corona a lo largo de su trayectoria, sin ser siempre el culpable de lo que sucedió en los momentos finales. Cuando el portero arribó a La Noria, precisamente los cementeros venían de perder dos finales, la del Clausura 2008 ante Santos Laguna y del Apertura 2008 contra Toluca, con Yosgart Gutiérrez como titular, siguiendo con la misma malaria de su colega, pues en su primer torneo como celeste arribó también a la final, al contar el club con una base ya consolidada, mas no pudieron superar a Rayados en la ida porque se levantó de un 1-3 en contra para culminar todo en 4-3, mientras en el Estadio Azul tampoco pudieron hacer valer su localía cayendo 1-2, siendo el primer descalabro de Chuy como cruzazulino.

Tiempo después estuvieron a nada de acariciar el cetro cuando estaban derrotando a su acérrimo rival América en el Clausura 2013, pues ganaron la ida con gol del argentino Christian Giménez y en la vuelta el colombiano Teófilo Gutiérrez aumentó la ventaja, sin embargo, vino una sorpresa, sumado a la mala estrategia de Guillermo Vázquez Jr., un tanto del cafetalero Aquivaldo Mosquera al minuto 88 y el autogol de Alejandro Castro, que desvió una pelota cabeceada por Moisés Muñoz que iba para afuera del campo, pero la intervención del mediocampista mandó todo a los penales, donde JJ poco pudo hacer ante las increíbles pifias de sus compañeros Javier Orozco y Castro.

Luego de eso, vinieron tiempos oscuros para los celestes, quienes ni siquiera podían ingresar a la Liguilla, hasta que el español Paco Jémez y el portugués Pedro Caixinha recompusieron el camino, con este último llegando a la final del Apertura 2018 consolidado como superlíder, mejor local y como la mejor defensiva, números que daban a entender que podían ser finalmente campeones, pero tal como siempre ha pasado, en la gran final se vio un Cruz Azul tembloroso, sin ganas de trascender que tropezó otra vez contra las Águilas.

Han sido varias veces en los últimos mercados de fichajes que se habla de la posible salida del medallista olímpico de La Noria hacia Atlas, Chivas u otros conjuntos por su edad, baja de nivel, por no existir un acuerdo con la directiva para alargar su contrato, entre otras tantas versiones, sin embargo, al final se mantiene como el hombre de confianza, el capitán, el líder, el del carácter fuerte, así que esta final contra Santos Laguna en el Guard1anes 2021 debe ser la buena para un futbolista que ha sabido picar tierra desde lo más bajo, que ha aguantado burlas y carrilla por ser un eterno subcampeón o segundón, debido a la rivalidad con Paco Memo y lo sucedido en selección, pero que nunca baja los brazos y siempre se aferra al sueño de ser monarca y dejar su nombre grabado.

El guardameta azteca vivió procesos en la Sub-17 y Sub-23, jugando Juegos Panamericanos y Juegos Olímpicos, llegó a la selección mayor, llegó a una final de Liga MX con un equipo al que pocos daban esperanza, ha portado los colores de uno de los cuatro grandes, siendo parte de dos Copa MX, una Supercopa MX, una Liga de Campeones de la CONCACAF, recibiendo también cuatro Balones de Oro, uno al Mejor Novato de la Liga MX en 2003 y tres al Mejor Portero en 2009, 2010 y 2012, así como el torneo amistoso de la Copa GNP tras la pandemia de COVID-19 vivida en el 2020, así que sería injusto que no pudiera despedirse de este deporte sin saber qué es ser campeón de Liga, algo que grandes porteros de México sí han podido saborerar, tal como Ochoa, Muñoz, Oswaldo, Antonio Carbajal, Ignacio Calderón, Pablo Larios, Jorge Campos, Adolfo Ríos, Óscar Pérez, Alfredo Talavera, Rodolfo Cota, Jonathan Orozco, Luis Míchel, entre otros más.

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