Sebastián Jurado ya demostró que puede con el peso de la titularidad en Cruz Azul
Se viene un nuevo torneo en la Liga MX. Con esto llegan nuevas oportunidades para todos los jugadores en cada uno de los equipos, incluyendo a Cruz Azul, que nuevamente le ha dicho adiós a piezas claves como el paraguayo Pablo Aguilar y Adrián Aldrete.
En La Máquina también aterrizó un nuevo estratega, el uruguayo Diego Aguirre, que tomó el puesto del peruano Juan Reynoso, llegando a la vez un nuevo parado, nuevas ideas y una dura competencia interna por ganar la confianza del estratega charrúa.
Hace unos días, el Diario Récord aseguró que Sebastián Jurado será el titular en el arco celeste por encima del veterano y capitán José de Jesús Corona, algo que no extraña después de las grandes actuaciones que regaló el juvenil el semestre pasado.
Chuy estuvo lesionado un largo tiempo y el canterano de Tiburones Rojos mostró buenas virtudes en su lugar, pues por algo lo compró Cruz Azul cuando desafiliaron al club escualo, sobre todo en el repechaje y la Liguilla del Clausura 2022. Esto le dará mucha confianza.
Tal vez en el pensamiento de Aguirre está el rejuvenecer su equipo y como JJ ya va de salida, es hora de seguir fogueando al jarocho, que está llamado a ser una joya importante, no sólo en el cuadro cementero sino también en la selección nacional.
Pese a la veteranía de Corona, él mismo está consciente de que deben abrir paso a los más jóvenes y en lugar de celar el puesto, se está encargando de aconsejarlo para que tenga una buena trayectoria, además también tiene como mentor al inagotable Óscar Pérez.
Desde sus inicios con el club tiburón el arquero llamó la atención de todos, ganando su derecho a ser seleccionado azteca, evitando goleadas aún mayores. Esto hizo que otros clubes quisieran sus servicios, pero al final ganó Cruz Azul. Debe respaldar su transferencia.
Con 24 años, Jurado no es ningún jovencito, está en una edad justa para alzar la mano y adueñarse totalmente del arco, pues ha habido otros que en su juventud han hecho ver que no les queda grande el saco como Guillermo Ochoa y Carlos Acevedo.
Quizás el guardameta pueda tener errores de vez en cuando, pero no es para crucificarlo. A todos les pasa. De esos errores aprende y lograrán hacer que crezca emocionalmente. Es hora de iniciar una nueva era con el veracruzano en el arco, la cual ya arrancó al hacerse con la Supercopa de la Liga MX tras imponerse en penales al Atlas.
A la vez, deberá comenzar a llevar consigo un papel de líder, tal como Corona, pero podrán irse acomodando poco a poco ya que la zaga también está prácticamente reconstruida con el peruano Luis Abram y quien se convierta al final en su compañero si le ganan su sitio a Julio Domínguez.
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