El Real Madrid llega con confianza al clásico del domingo

El Real Madrid consiguió ayer una victoria bastante holgada frente al Shaktar y pudo desquitarse de los malos resultados que acompañaron al equipo hasta el parón. Este domingo se enfrentarán a un Barcelona que no se puede permitir más tropiezos en el campeonato liguero, pues ya son varios partidos en los que se ha dejado puntos de forma merecida, con un juego pobre e impropio de futbolistas de ese calibre.

En ninguno de los tres encuentros que precedieron al parón de selecciones el conjunto blanco logró los tres puntos. Un empate frente al Villarreal fue el comienzo de una semana nefasta en la que cayeron derrotados en el Bernabéu frente al Sheriff y contra el Espanyol en Cornellá.

Esta serie de actuaciones insuficientes auguraban una costosa vuelta de los encuentros internacionales, pero el equipo ayer demostró que sigue estando fino de cara a puerta y preparado para sacarle los colores a cualquiera.

El buen partido del conjunto blanco habrá metido el miedo en el cuerpo a un Barça que se juega la vida en los dos próximos choques. No ganar frente a Dinamo de Kiev y Real Madrid supondría despedirse de la Champions y casi de LaLiga.

Los de Ancelotti prepararán el encuentro a conciencia sabiendo que tienen poco que ganar y mucho que perder, pues vencer a este Barcelona es lo normal, más aún después de la buena racha de clásicos que acumulan los blancos. 

El equipo saldrá con todo y muy ordenado, característica típica de los onces de Carlo Ancelotti, que salvo sorpresa absoluta le ganará el duelo de banquillos a Koeman. 

Con un día más de descanso el Real Madrid tratará de crear un partido físico y de desgaste, circunstancia en la que son muy superiores a este Barça que no podrá contar con su defensa más adecuado para este tipo de choques; Ronald Araujo.