¿La afición de Cruz Azul debería perdonar a Javier Aquino?
Por Benjamín Guerra
Javier Aquino es canterano de la Máquina Celeste de Cruz Azul, el jugador debutó en 2010 con el equipo de La Noria y tres años después de marchó al fútbol europeo con el Villarreal que en ese entonces competiría en la Segunda División de España.
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Un par de años más tarde, después de haber fracasado en el Viejo Continente, los Tigres de la UANL lo trajeron de vuelta al fútbol mexicano en 2015 y desde entonces se ha mantenido en el equipo de San Nicolás de los Garza en donde ha sido un multicampeón con la institución y ha declarado públicamente que es el club con el que se siente identificado, incluso le ha festejado a la afición cruzazulina sus goles besando el escudo de los felinos.
Pero eso no es todo, el pasado 15 de julio en la semifinal del torneo de preparación de la Copa por México, ambos cuadros se enfrentaron en donde el equipo cementero fue quien avanzó y derivado de la calentura por el encuentro al final, Javier Aquino, comenzó a burlarse de algunos de sus excompañeros y de la institución por sus años sin título de liga, por lo que evidentemente cayó muy mal en el seno celeste.
Ahora, previo al enfrentamiento de la jornada 14 entre capitalinos y universitarios en el Estadio Azteca, a través de una entrevista con TUDN, el centrocampista ofreció una serie de declaraciones pidiendo disculpas a la afición celeste y a la institución que le dio la oportunidad de consolidarse como futbolista profesional, tratando de limpiar su imagen.
Evidentemente, aquí cada persona que se sintió aludida por los comentarios del jugador de 30 años decidirá si le concederá una disculpa o no, pero primeramente, analizando el contexto de las situación, eso fue algo que jamás debió haber sucedido.
Desde meses anteriores, ya se venía calentando el tema de Aquino con Cruz Azul, destacando su aprecio por los colores de los regios y menospreciando lo que le ofrecieron en la Máquina.
Ya sin mencionar que la disculpa estuvo mal empleada, dada la petición, pues una disculpa se ofrece y no se pone en duda que claramente ofendió al sector, pero independientemente de eso, asumió su responsabilidad tras equivocarse y soltar esos comentarios, después de lo que la institución hizo por él.
Pero en fin, cada quien tendrá su percepción y si es que decide darle importancia a alguien que insultó y ofendió gravemente al club y que no dio una disculpa sincera.