Monarcas es de Morelia, Mazatlán no será mejor sede que Michoacán
Por Benjamín Guerra
En el último par de días una gran cantidad de medios de comunicación en México han mencionado la inminente salida de Monarcas del Estado de Michoacán, para su cambio de sede en el Estado de Sinaloa. Incluso la afición purépecha salió a manifestarse en la calles de Morelia el pasado domingo, en plena crisis de pandemia, situación que es entendible, pero no deja de ser preocupante. Con todo y eso, y con la magnitud de los rumores a un gran sector de los aficionados no les importó y alzaron la voz.
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La ciudad de Morelia se encuentra devastada por la injusticia y crueldad con la que distintos comunicadores han manejado el tema de la posibilidad de desaparecer a un equipo de tradición y arraigo dentro del fútbol mexicano, así mismo otra gran cantidad de periodistas y aficionados han demostrado su molestia a las intensiones y han brindado su apoyo a la institución.
Pasan los años y en pleno 2020 el balompié azteca sigue manchándose con este tipo de acciones, que no es increíble, pero si es realmente inconcebible y desagradable. Monarcas Morelia no será el equipo de gran alcance en territorio nacional, pero es un equipo digno dentro del país a lo largo de toda su historia, ha conseguido todos sus logros deportivos a expensas de los malos tratos y corto presupuesto que le proveen sus dueños, en este caso Grupo Salinas, que desde 1996 han sido los jerarcas del club, casi 25 años al frente. Y aún así, el equipo es el tercer mayor club con seguidores en la Unión Americana solo por debajo de América y Chivas de acuerdo con cifras demográficas y etnográficas.
Desde su último ascenso a Primera División en 1981 nunca han regresado a la división de plata, no han adquirido franquicia para lograr un ascenso u algo por el estilo, absolutamente todo se lo han ganado en la cancha.
Es una injusticia tremenda lo que sus dueños y el Gobierno de Sinaloa le quieren hacer a la noble afición rojiamarilla que, si bien el presidente de la Liga MX, Enrique Bonilla, ha manifestado que no existe aún una solicitud de cambio de sede, también afirmó que si se desea hacerlo deben hacerlo puntualmente, además, se cansó de resaltar las bondades del nuevo estadio de Mazatlán y su ciudad, dando a entender que, a él no le importaría un cambio de plaza.
Está claro que la corrupción dentro del fútbol mexicano sigue latente, este tipo de actos son inadmisibles, por una parte, Grupo Salinas mete presión al Gobierno de Michoacán dando a conocer mediante sus voceros como David Medrano y haciéndose noticia nacional, que Monarcas saldrá del Estado, y además mediante sus demás comunicadores de Azteca Deportes, se encargan de justificar la medida y priorizando el negocio, dejan de lado el "romanticismo", dando opiniones sin fundamento, ni sentido, como lo es decir que la plaza de Morelia no está al nivel de Primera División, cuando los datos y registros dicen otra cosa, solo como ejemplo, Monarcas Morelia registró una asistencia superior en su estadio durante el Clausura 2020 a la de un equipo de alta demanda como Cruz Azul que por cierto, estaba teniendo una gran temporada siendo el líder del certamen.
Después está el Gobierno de Sinaloa y sus empresarios que, en sus deseos por tener un equipo de Primera División para su nuevo estadio, y atraer turismo cuando jueguen los denominados "cuatro grandes", quieren destruir una franquicia como lo es la Monarquía con más de 70 años de historia. En lugar de comenzar un proyecto serio y sólido desde la creación de un club y construir una identidad propia. Y aunado a eso, el "grandioso" presidente de la Liga MX que, por cierto, es un allegado del Gobernador de Sinaloa Quirino Ordaz, por lo que se le ha visto en fotografías muy contento con él, y que lo ha invitado cordialmente a visitar las instalaciones del estadio que según el mandatario es de los mejores seis recintos futbolísticos del país.
Seguimos esperando la versión oficial, pues nadie de los implicados se ha proclamado afirmando 100% las noticias, otros han afirmado que el Gobierno de Michoacán se encuentra negociando para evitar a toda costa el traslado, pero en caso de que se llegue a concretar la partida, será una porquería más en el libro de las desgracias del fútbol mexicano.