Miguel Herrera no es tonto, tiene la capacidad de levantar el barco del América

Una crisis es la que está viviendo el americanismo desde el tremendo batacazo que le propinó el Cruz Azul en la Copa GNP por México y que se acentuó luego de la nueva derrota frente a las Chivas; incluso el hashtag #FueraPiojo incendió las redes sociales y confirmó que en el entorno azulcrema no hay medianías: si no es éxito, es fracaso.

Como es una costumbre desde que inició su segunda etapa como DT del América, cada que el equipo de Miguel Herrera tiene un partido malo, la afición exige su cabeza y lo catalogan como un pésimo entrenador. Sin embargo, al final de la temporada, de alguna forma u otra, siempre consigue llevar a las Águilas, como mínimo, a semifinales del torneo.

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Es completamente válido el discurso de que los ciclos se terminan y que el suyo podría estar en su etapa final; sin embargo, si un entrenador se ha ganado el derecho a continuar a pesar de no levantar el título todas las temporadas, ese es Miguel Herrera. No se ha puesto en su justa dimensión el significado de alcanzar cada torneo los 30 puntos como mínimo, calificar siempre a liguilla, acceder por lo menos a semifinales y además conseguir títulos.

De los 154 partidos oficiales que ha dirigido en su segunda etapa con el conjunto azulcrema, Miguel solamente ha perdido 38. Eso significa que ha sacado puntos en el 75% de sus partidos y que además acompaña con un título de Liga MX, otro de Copa MX y un Campeón de Campeones.

Más allá de eso, la seguridad que te da un entrenador de estar siempre peleando por el título es algo que solo se va a valorar cuando ya no esté, pues antes de la era Miguel Herrera, el América navegó sin rumbo en la Liga MX durante casi una década. Es aquí cuando el respeto y la paciencia debe de ponerse en manifiesto tratándose de una club grande como las Águilas.

¿Cuántas veces se habló de falta de continuidad en el fútbol mexicano?, ¿de pocas oportunidades y nula paciencia? El América está predicando un ejemplo que antes se exigía y además le está dando resultados. El 'Piojo' ha jugado dos finales desde su regreso, más que cualquier otro equipo empatado con Tigres, y salvo una desatención específica en la última vs Monterrey, habría ganado ambas.

También es falso afirmar que es el equipo que mejor fútbol despliega y esa es la principal tarea pendiente de Miguel. La exigencia no debe parar y es justo pedirle mejoría en el equipo conforme pasan las temporadas, pero de ahí a exigir su cabeza luego de un torneo amistoso y tras llegar a una final existe un mundo de incongruencia.

Herrera es un tipo listo y no es ninguna clase de idiota, ha sabido mantener un equipo estable y muy regular en un fútbol complicado y sin el presupuesto que otros equipos tienen, por lo que tiene más que merecida una renovación que se cumpla de acuerdo a sus resultados y el beneficio de la duda ante los malos partidos.

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