Messi solo mancha su nombre al no presentarse a pruebas médicas del Barcelona

FC Barcelona v Leganes - Copa del Rey: Round of 16
FC Barcelona v Leganes - Copa del Rey: Round of 16 / Quality Sport Images/Getty Images
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A Messi nadie le va a quitar su idea de abandonar el FC Barcelona este mismo verano y desde diversos medios ya se ha anunciado que el jugador no acudirá hoy a las pruebas médicas que había programado el club para reincorporarse a los entrenamientos.

Messi durante la debacle ante el Bayern
Messi durante la debacle ante el Bayern / Pool/Getty Images

El movimiento tiene una doble implicación. Por un lado, le vuelve a decir al club que se quiere ir, que no quiere continuar. Por el otro busca una escusa para no presentarse en los entrenamientos, para no ofrecer una imagen con el escudo del Barcelona de fondo. No considera que sea ya jugador del Barcelona y así quiere que quede constancia.

Pero una cosa es lo que opine Messi de su contrato y otra muy distinta lo que opina el Barcelona. Para el Barcelona, sigue siendo su capitán y salvo acuerdo pactado entre las partes, su jugador. Un jugador, por cierto, con un buen salario. Lo suficientemente bueno como para que cumpla con sus obligaciones como trabajador hasta que club y jugador o un juez (en relación con las dos interpretaciones del contrato) determinen lo contrario.

Al final, lo que Messi está haciendo con esta actitud es manchar su legado y su historia en el club. Él le ha dado mucho al Barcelona, pero también a la inversa. No en vano, el jugador ha renovado en numerosas ocasiones y de no ser por la debacle del Bayern, seguramente se hubiera producido otra más. En el club le han dado privilegios que casi ningún otro empleado tendría en su empresa.

Messi pudo marcar contra el Nápoles su último gol como jugador del Barcelona
Messi pudo marcar contra el Nápoles su último gol como jugador del Barcelona / LLUIS GENE/Getty Images

Se le ha reconocido constantemente y sin embargo, cuando más complicado se le pone a la entidad en los últimos años y cuando más se le necesita, quiere coger las maletas y marcharse. Es totalmente lógico su enfado con la directiva, pero con quién debe ser agradecido es con la entidad, no con una directiva a la que le restan meses para marcharse. Por hacer daño a los que mandan ahora, va a echar por tierra una relación casi idílica de 20 años.


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