Messi se levanta como el gran capitán del Barcelona

Lionel Messi ha estado muchísimos años en la boca de todos. Desde su debut, todo el mundo del fútbol paró sus relojes para concertar varios minutos al día en los que hablar de Lionel Messi. El argentino ha escuchado comentarios de todo tipo: desde que es un D10S o el MESSías hasta que no vale y nunca podrá ni lamer la punta del taco de Diego Armando Maradona. Todo ese tiempo, Messi ha estado callado. La Pulga habla sobre el césped, calla bocas y espera su momento. Ahora ha llegado el de hablar, el de erguirse como capitán del Barcelona en un mal momento del club… y vaya que si lo ha hecho.

El liderazgo y el compromiso son dos condiciones que se han puesto continuamente en duda sobre Leo. Voces autorizadas exclamaron que Messi nunca podría reinar en el fútbol porque tiene la boca chiquitita y apenas levanta la voz. No tiene carácter para ser el líder del vestuario y proteger a sus compañeros. Otras voces, tal vez estas algo más radicales, aseguraban que el argentino huye de los malos momentos. En menos de una semana, Messi, con la elástica de los culés y el micro de Movistar o del propio equipo, ha vuelto a acallar a sus haters.

Primero empezó tras la derrota contra Osasuna. El argentino no tuvo reparas en colocarse enfrente de Ricardo Sierra y contestar a todas sus preguntas, aunque no tuvieran exclusivamente que ver con el partido. El argentino fue muy crítico con el juego del equipo y aseguró que, de seguir así, caerían contra el Nápoles. Fue duro con todos, pero defendió a sus compañeros. Sus palabras fueron portada y Leo asumió todo el peso del vestuario.

No fue suficiente. Ayer, tras la goleada contra el Alavés, volvió a hablar. Siempre es más fácil después de una manta. El argentino, antes de pasar por el vestuario, habló con los micros del club blaugrana y recalcó que “la actitud del equipo y el compromiso es el partido a seguir”. Tras el incendio, él mismo apagó los fuegos y demostró ser más capitán que nunca.

No obstante, se debe tener en cuenta que La Pulga fue mucho más capitán tras jugar contra Osasuna que después del partido en Mendizorroza. Este último encuentro, después de la victoria y con una entrevista al propio club, suena más a voz pactada con la estrategia comunicativa del club. Más allá de esto, lo cortés no quita lo valiente. Volvió a dar la cara y a ser él la cara visible del Camp Nou. Messi ha conquistado el último pero que se le reclamó.