Messi revolucionaría el poder de la MLS en el mundo
Por Carlos Alberto Pérez García
Cada que Leo habla, el mundo del fútbol escucha atentamente, porque quien habla no es un cualquiera. Es una persona normal, con sentimientos, ambiciones y deseos, pero en su cerebro yace el pensamiento de un genio que se convirtió en uno de los mejores en la historia de su disciplina.
Messi ha dicho que en su mente, esa que ha asimilado 644 goles con un club y que ha gozado 36 títulos oficiales más seis balones de oro, el futuro de su carrera se vislumbra en la Major League Soccer de Estados Unidos. ¿Cómo es posible que una liga de un "pobre" nivel futbolístico pueda seducir a uno de los futbolistas más laureados del mundo?
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La razón es relativamente sencilla de deducir: hay dinero, estabilidad y una calidad de vida envidiable. A pesar de que estas razones las impulsa la economía más fuerte del mundo, el fútbol no se queda de lado y quien se atreva a decir que Messi sólo quiere ir a Estados Unidos por plata, está completamente equivocado.
El fútbol de Norteamérica sigue creciendo a nivel futbolístico, pero aunque se encuentra a años luz del nivel europeo, la llegada de Messi significaría un duro golpe sobre la mesa de la MLS hacia el resto del planeta, sobre todo si consiguen su llegada en el próximo par de años. Por si no lo han entendido, ¡le estarían quitando los últimos años de carrera al mejor jugador de la historia!
Los derechos de transmisión se irían a las nubes, la competencia interna de la liga se dispararía, los cracks mundiales con menos ambición deportiva voltearían aún más a Estados Unidos y la MLS se enfrentaría al crecimiento más explosivo de su historia, algo que de acuerdo a su forma de trabajar, aprovecharían al 300% para dar el salto que necesitan para emparejarse un poco más con el viejo continente.
Leo dio el primer paso en el intercambio de miradas con la MLS, por lo que la gente en Estados Unidos, desde los trajeados hasta los de pantalón corto, deberán estar trabajando en cómo abordar este fichaje, porque no será un equipo el que lo fiche, será todo un país y una industria quien traiga al mejor jugador del mundo. Eso es algo que no se puede desaprovechar y que impactará en el desarrollo futbolístico del continente de una forma inigualable.
Ojo que viene el mundial de Estados Unidos en 2026, están conformando una de las mejores selecciones de su historia y que solo necesitan una liga formidable para ponerse en el ojo del huracán en el mundo del fútbol. A estos norteamericanos hay que verlos a detalle, porque no mueven ficha hasta asegurar la ganancia.
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