Messi, a diferencia de otros, demuestra que su amor por el Barcelona está por encima del dinero

Messi en un partido con el Barça de liga frente al Atlético de Madrid
Messi en un partido con el Barça de liga frente al Atlético de Madrid / Jasper Juinen/Getty Images
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Puede ser hoy, puede ser mañana o puede ser la semana que viene. Lo que sí es seguro es que Leo Messi renovará con el Barça. Un Messi que ha demostrado que ama este escudo por encima de todo y que si hay que hacer sacrificios salariales para continuar defendiendo la camiseta del club de su vida los va a hacer.

El astro argentino acaba de salir campeón de la Copa América con la selección por lo que acaba de comenzar sus vacaciones y es lógico que su intención no sea estar todo el día pegado al móvil o reunido para llegar a un acuerdo. Lo más probable es que la renovación se cierre una vez Messi vuelva a Barcelona. Además de la demostración de Messi de que está enamorado del Barça, también hay que otorgar una enorme cantidad de méritos a Joan Laporta. Ha conseguido que Leo pase de querer firmar con otro club el pasado agosto a convencerle para que se quede en el Barça cobrando menos. La gran mayoría de los votantes eligieron a Laporta por encima del resto de candidatos por su estrecha relación con Messi, y por la increíble confianza que el argentino depositó siempre en él mientras duró su estancia en la presidencia.

Messi ya ha dejado claro por activa y por pasiva que su futuro próximo sigue en Barcelona. Las ofertas del PSG y de los equipos de Manchester se detuvieron en el instante en el que el propio jugador les insistió en que no iban a hacerle cambiar de opinión. Además en este mercado de traspasos ha llegado al Barça su compañero y amigo Sergio Agüero.

La prensa española se echó encima de Messi cuando envió el burofax pidiendo al Barcelona abandonar el equipo lo antes posible. Antes de continuar con el tema de la prensa hay que admitir que realmente la gestión de Bartomeu en este aspecto ha salvado el futuro del Barcelona, pues dejar marchar a Messi la temporada pasada habría supuesto la guinda del pastel de un mandato terrible. Desde que envió el burofax la prensa empezó un ataque personal contra la figura del argentino poniendo en duda durante toda la temporada su barcelonismo y su compromiso con el club al que le ha dado todo durante tantos años.

Una vez más el paso del tiempo demuestra que los que menos hablan son los que realmente más cosas dicen. Leo ha vuelto a demostrar que el Barcelona lo es todo para él y que ese amor mutuo no se va a extinguir por culpa de una rabieta o de una crisis deportiva y económica generada por una paupérrima gestión.