Los dos aciertos y tres errores del FC Barcelona en su victoria ante el Dinamo (1-0)
Por Estefanía Ramos
El FC Barcelona le dio una alegría a su afición y se llevó los tres puntos ante el Dinamo de Kiev, los primeros en esta Champions. El equipo de Koeman no sufrió y fue el dueño de la posesión del balón.
El Dinamo no inquietó a Ter Stegen en ningún momento, de hecho no tiraron entre los tres palos, pero el Barça no fue capaz de marcar el gol que le diese la tranquilidad definitiva y acabaron el partido echándose atrás.
Aciertos
Posesión útil de balón
No es ninguna sorpresa que el Barcelona tenga la posesión de balón, pero a diferencia de otros partidos hoy sí le sacó rendimiento. El equipo azulgrana inquietó el área de Bushchán, tiró a portería a diferencia de lo que hizo ante el Bayern y marcó sus primeros goles en esta Champions.
Tres puntos para pensar en octavos
Tras dos derrotas en los dos primeros partidos la clasificación para octavos se veía muy complicada pero esto tres puntos son una inyección de moral y sobretodo que matemáticamente el Barça depende de sí mismo para pasar a la siguiente ronda. La primera posición parece que puede ser para el Bayern pero la segunda está a su alcance.
Además, llegan al Clásico con dos vicotrias consecutivas, algo que no habían logrado esta temporada.
Errores
Los cambios
No es que los cambios empeorarán al Barcelona, al revés, con Ansu Fati en el campo el Barça es mejor, pero teniendo el Clásico a la vuelta de la esquina Koeman podría haber hecho otra gestión del equipo. Sergiño Dest acumuló más minutos durante el parón de selecciones que Mingueza y el técnico holandés decidió sacar del terreno de juego al canterano en el descanso.
Y ganando 1-0 podría haber retrasado el cambio de Ansu Fati y así darle todavía más descanso pensando en el Madrid.
El equipo se echó atrás
En la segunda mitad llegó un momento que el Barça se preocupó más de defender el 1-0 que de buscar el segundo gol. Y no es la primera vez que el Barcelona se echa atrás con sólo un gol de ventaja, algo que a la afición no le gustó tal y como demostró silbando al equipo cuando se encerraban en el área. Los ucranianos tampoco crearon ocasiones que pusieran el resultado en peligro pero la sensación no fue buena.
La actitud
No es sólo que el Barcelona se echase atrás, es que la actitud del equipo cambió mucho de la primera a la segunda mitad. Quizá el equipo no de para más, pero este Barça ofreció muy poco fútbol y acabó perdiendo tiempo, algo insólito.
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