Los aciertos y errores de Boca Juniors en la derrota 1-0 ante Central Córdoba por la Liga Profesional
Por Joaquín Jary
Boca Juniors cayó 1-0 ante Central Córdoba de Santiago del Estero por la segunda fecha de la Liga Profesional. Los de Battaglia, en una noche errática, no lograron anteponerse al Ferroviario y deberán cambiar rápido la página para afrontar con otra energía la doble fecha que se le viene...
- F3 vs. Tigre (L), miércoles 21:30 horas
- F4 vs. Barracas (V), domingo 21:30 horas
A continuación, repasamos aciertos y errores del Xeneize frente a los dirigidos por Sergio Rondina:
Aciertos:
1. Bancar a Rossi para el Máster en Penales
El arquero titular de Boca hace tiempo ya no tiene dudas. Agustín Rossi, más allá de su sobriedad para atajar, demostró hacerse un monstruo de mil quinientos metros cuando se le para un rival a 12 pasos de distancia.
Hoy contuvo un nuevo penal en Santiago del Estero y alcanzó una estadística increíble: desde su regreso al Xeneize, tapó 4/5 penales que le patearon.
2. Chango Top
Exequiel Zeballos dio la nota una vez más para levantar a Boca Juniors en los últimos minutos y así redondeó otra actuación deluxe.
Entregó 6 pases clave, envió 7/11 centros precisos y ayudó en la parte defensiva con duelos ganados. Diamante en bruto.
3. Picardía para evitar el 0-2
Gracias a la voz de mando de Carlos Izquierdoz, Boca evitó que Central Córdoba aumente la ventaja en el marcador.
Luego de la atajada desde los doce pasos de Agustín Rossi, el Ferroviario invadió el perimetro y así logró convertir el 0-2 a partir del rebote. Pero, no, no... El capitán se avivó, vio esto y pidió rápidamente el VAR al árbitro para que sea anulado.
No sirvió de mucho pero demuestra que hay un Boca más despierto.
Errores:
4. Battaglia, al estilo Alfaro
Sebastián Battaglia metió un cambio de último momento para pisar suelo santiagueño: alineó a Nicolás Orsini como titular, pero no sólo eso... ¡De N°8! ¡De mediocampista/extremo derecho!
El fantasma de Franco Soldano en el mismo puesto por decisión de Gustavo Alfaro es imposible que no aparezca. Se repitió.