Los 13 motivos por los que el 2020 ha sido el peor año del Barcelona desde principios de siglo

2020 está a punto de acabarse. En particular, el año del Barcelona ha sido un completo desastre. El peor desde 2002, justo un año antes de que Laporta (que suena para volver a la presidencia con mucha fuerza) tomara posesión de su cargo por primera vez. Estos han sido los motivos por los que el 2020 ha sido tan aciago para el Barcelona:

1. Adiós a la Supercopa de España... y a Valverde

En enero ya se le empezaron a torcer las cosas a los azulgrana. Jugaban en Arabia la Supercopa de España como campeones de liga y se enfrentaban en semifinales al Atlético de Madrid. A pesar de dominar y de hacer un buen partido, no supieron rematarlo y los de Simeone les remontaron con dos goles in extremis (2-3). Esta derrota supuso el adiós al primer título del año y el fin de la era Valverde como entrenador. Setién tomo su relevo

2. Fin al dominio en nuestro país

El Barcelona ha sido el gran dominador del fútbol español desde 2008, con la llegada de Guardiola. En todos los años naturales salvo en 2014 ganaron al menos un trofeo a nivel nacional, para un total de 18. Y después de ese mencionado 2014 levantaron un histórico triplete, así que mal no les fue. En 2020 se han visto superados por el Real Madrid. Los blancos han ganado Supercopa y liga, les han 'mojado la oreja' los dos Clásicos de este 2020 (2-0 y 1-3) y además marchan colíderes en la actual. En Copa del Rey el Athletic dio cuenta de los culés allá por el mes de febrero (1-0), lo que continuaba con las decepciones del club.

3. El vestuario no hace caso de Setién

La llegada de Setién al equipo no hizo sino empeorar la situación. El juego del Barcelona era cada vez más plano y a los azulgrana les tocaba sufrir para ganar. La ruptura entre el vestuario y el cuerpo técnico era evidente, con desplantes en público a Sarabia (segundo de Setién) y ningún comentario de apoyo al cuerpo técnico. El cántabro no cuajó y en ningún momento dio la sensación de tener el mínimo control sobre un vestuario lleno de estrellas

4. Batacazo histórico en Champions y temporada en blanco

Con la todo perdido a nivel nacional, en agosto y tras el parón por COVID la Champions podía salvar la temporada para el Barcelona. Un gran Messi llevó a los azulgrana a la final a 8 tras su doblete ante el Nápoles en octavos (3-1). Sin embargo, eso a la postre sería casi peor. El Bayern demostró que el Barcelona no tenía nivel ni de lejos para competir con los grandes de Europa y les endosó una goleada histórica (2-8). Para más inri los dos últimos goles bávaros los marcó un Coutinho que estaba cedido por el Barcelona allí. Temporada en blanco y desastre absoluto en el adiós de Setién

5. Messi se quiere ir y pone patas arriba el club

"Me voy". En un escueto comunicado apenas un par de días después del varapalo ante el Bayern, Messi anunciaba que ponía fin a su temporada en el Barcelona. Era la peor noticia que en esos duros momentos podía recibir la entidad, la marcha del mejor jugador de su historia. La temporada había sido un desastre aunque el desgaste del argentino venía ya de lejos, con un club a la deriva y deportivamente muy debilitado. "Con este equipo ya no alcanza" decía tras perder la liga en una derrota contra Osasuna (1-2). Al final, la elevado ficha del argentino y el agarrarse a la cláusula por parte del club impidieron su marcha. Eso sí, en 2021 acaba contrato y las opciones de que se vaya siguen ahí

6. Adiós a una leyenda como Luis Suárez por la puerta de atrás

Luis Suárez también ha vivido su calvario particular en este 2020 en el Barcelona. Tras la Supercopa de Europa ante el Atlético, el uruguayo se sometía a una operación de rodilla que lo dejaría 4 meses fuera y a priori le haría perderse todo lo que quedaba de temporada. Al final el parón por el coronavirus le permitió jugar las últimas 11 jornadas de liga y los últimos 3 de Champions, aunque visto el final que tuvieron casi mejor que no hubiera participado del desastre azulgrana. Por su fuera poco, con la llegada de Koeman dejó de contar para el holandés y se tuvo que marchar al Atlético de Madrid. Una leyenda como él se despedía del club después de una derrota histórica y por la puerta de atrás

7. Salida de las 'vacas sagradas'

La salida de Suárez no fue la única este verano en Can Barça. Aparte del uruguayo, otras vacas sagradas del vestuario azulgrana pusieron fin a su etapa en el club. Koeman dio el finiquito a dos cracks como Vidal y Rakitic, venidas a menos el último año, y por si fuera poco el club llevó a cabo la venta de Semedo a pesar de haber tenido un rendimiento aceptable. Al menos no se añadió el nombre de Messi al de este éxodo.

8. Mala situación económica

La crisis financiera del Barcelona ya viene de otros años, pero en este 2020 se ha agudizado aún más. El coronavirus, no ganar ningún título y no ingresar nada con la marcha de Suárez, Rakitic o Vidal han perjudicado mucho a las arcas del club. A día de hoy no tiene liquidez para llevar a cabo fichajes por grandes sumas de dinero, algo que le vendría muy bien para llenar de ilusión los corazones de unos aficionados azulgranas muy dececpionados en este 2020 con el equipo

9. Riqui Puig, un bajonazo de categoría

Una de las grandes esperanzas de cara al futuro para el barcelonismo era Riqui Puig. El mediocentro había ilusionado con su desparpajo en los partidos que había jugado con Valverde y con Setién había empezado a tener más protagonismo en el primer equipo. La llegada de Koeman, unida a la salida de tantos centrocampistas, parecía que sería la 'lanzadera' definitiva para el catalán. Sin embargo, todo explotó cuando Ronald dijo que no contaba con Riqui a los pocos días de convertirse en entrenador azulgrana. Se le buscó una salida, y aunque al final se quedó, a día de hoy su papel en el equipo es testimonial. Un bajonazo de categoría

10. Bartomeu culmina un 'annus horribilis' para él

El no haber podido fichar a Neymar ya empezaba a restarle al bueno de Bartomeu. A comienzo de año llegó su fallo al nombrar a Setién por Valverde, como se vio a la postre. Además le saltó en la cara el 'Barçagate', en el que se demostró que contrató una empresa para espiar a leyendas como Messi, Xavi, Piqué o Guardiola para ensuciar la imagen de éstos y limpiar la suya. Se quedó como el presidente del 2-8 y a punto estuvo de ser el que perdió al propio Messi. Al final en el mes de octubre acabó dimitiendo en un 'annus horribilis' para él

11. Las lesiones de Piqué y Ansu Fati

Ansu Fati, junto con Pedri, ha sido una de las pocas noticias positivas del Barcelona en este 2020. El jugador hispanobissauguineano era el mejor en el comienzo de temporada para el equipo y a sus apenas 17 años debutada y marcaba incluso con la selección española absoluta. Había empezado como un tiro y estaba en la pelea por el Pichichi. Sin embargo, en el partido contra el Betis (5-2) todo se torció. El chaval se rompía el menisco de su rodilla derecha y tendrá que estar fuera de los terrenos de juego hasta marzo. Un auténtico varapalo. A esta lesión se unió poco después la que se produjo Piqué ante el Atlético de Madrid (1-0). El central sufrió un esguince grave en su rodilla y también estará sin poder jugar con el equipo, como mínimo, hasta el mes de abril. Muy mala fortuna en este sentido también

12. Griezmann no ha demostrado estar en la mesa de Messi y Cristiano

En el verano de 2019, el Barcelona daba el bombazo al fichar a Griezmann desde el Atlético de Madrid por 120 millones de euros. Un jugador que en su día decía que estaba a la altura de Messi y Cristiano y que tendría su gran oportunidad de demostrarlo junto al argentino. Empezó bien, pero se fue diluyendo como un azucarillo y al final de la temporada pasada su rol fue testimonial. Con Koeman en el banquillo, su situación no ha mejorado y su nivel está muy lejos de su mejor versión. De hecho, ahora mismo es suplente por detrás de Pedri o incluso Braithwaite. El galo no ha demostrado ni de lejos ser como Lionel o Ronaldo

13. El equipo no endereza el rumbo

A pesar de la marcha de jugadores ya algo mayores, de fichar a un nuevo entrenador y de la dimisión de Bartomeu y su junta, el Barcelona está igual de mal que la temporada pasada. En liga son 5º a 8 puntos de Atlético y Real Madrid y su juego deja muchísimo que desear, es muy irregular. En Champions, en un grupo fácil y después de una solvente victoria ante una Juventus mermada (0-2), fallaron con estrépito el último día contra los italianos en casa (0-3) y al final han pasado como segundos de grupo. Se las tendrán que ver con el PSG de Pochettino en octavos con la vuelta fuera, a saber si con público. 2021 puede servir para enderezar el rumbo, pero la situación deportiva es incluso peor de la que tenían al acabar el 2019.