Lo mejor para Isco sería marcharse del Real Madrid

Isco Alarcón
Isco Alarcón / Denis Doyle/Getty Images
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Por regla general, las grandes estrellas del fútbol llegan a su madurez deportiva a partir de los 28 años. Es ahí cuando suelen vivir sus mejores años y cuando su cuerpo da más de sí. No es una regla exacta y hoy en día no hay mejor ejemplo de ello que Isco.

El último gran partido de Isco con el Real Madrid fue en 2018 contra la Roma
El último gran partido de Isco con el Real Madrid fue en 2018 contra la Roma / Quality Sport Images/Getty Images

Sin ser nunca indiscutible en el Real Madrid, el malagueño siempre se había ganado un hueco en el XI a base de esfuerzo y, por supuesto, gracias a su increíble calidad individual. Así se explica que fuera titular en partidos trascendentales como las finales de Cardiff (2017) o la de Kiev (2018) por delante de Bale. Tal fue su nivel, que se convirtió en el líder de la selección española en el Mundial de Rusia bajo las órdenes de Lopetegui.

Pero de forma casi paralela a las situaciones que vivió el técnico vasco - se marchó de la selección de forma abrupta y fue cesado en el Real Madrid - el nivel de Isco fue cayendo en picado. Solari lo mandó al ostracismo y Zidane no ha sabido o no ha podido revitalizarlo. Hablamos de un jugador que llegó a valer 90 millones de euros en octubre de 2018 y ahora vale 20 millones según Transfermarkt. De hecho, si no se ha ido en enero, seguramente ha sido por la falta de ofertas atractivas y por no dejar al equipo más debilitado aun.

Pocos esperan ya que el mediapunta de un vuelco a su situación. Se constató, de nuevo contra el Getafe, cuando Zidane colocó al canterano Marvin por delante en la titularidad. El gesto subyace la poca confianza de Zidane en él. En el pasado, el galo habría puesto a Isco con seguridad aun reapareciendo de una lesión. Hoy en día, la lesión sirve de excusa para no alinearle.

Isco calentando con Valverde y Militao de fondo
Isco calentando con Valverde y Militao de fondo / Quality Sport Images/Getty Images

Su futuro no pasa por el Real Madrid. La lógica invita a pensar que acabará marchándose en verano. Acaba contrato en 2022 y el club intentará sacar un buen pellizco por el jugador. A él también le viene bien cambiar de aire e intentar remontar tras dos años 'perdidos'. En España hay pocos jugadores con su calidad y su 'magia'. Si no es en el Real Madrid, al menos que sea en otro lado.


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