La última chance: si Boca pierde ante River, Miguel Ángel Russo debe renunciar
Por Franco Formoso
Boca no juega a nada y está flojo en su grupo de la Copa Libertadores. Encima ahora se le viene River en el plano local: si pierde, Russo debe renunciar. ¿Los motivos? La falta de funcionamiento colectivo y de reacción inmediata para realizar las modificaciones pertinentes.
Es muy raro lo que pasa con Boca. Yo no soy un experto en salud mental, pero puedo asegurar que la mayoría de sus hinchas están descontentos. Porque el equipo no los llena, y eso que salió campeón de dos competencias locales al hilo. Primero la Superliga, luego la Copa Maradona... Y no están satisfechos. ¿Por qué? Porque a Boca le falta convencimiento, le falta alma. Le falta ganar cosas importantes.
Los hinchas de Boca están cansados de obtener títulos locales, esos que siempre fueron desprestigiados por ellos mismos, y de perder contra River en los mano a mano, de no ganar ninguna Copa Libertadores... Y justamente eso es lo que se viene. Un mano a mano con River.
Será Russo contra Gallardo, Gallardo contra Russo. Miguel Ángel tendrá una nueva oportunidad de darle una alegría a los hinchas de Boca, una de esas que no se da desde hace tiempo. Es un mano a mano, el que gana avanza de ronda y eso hace a esta Copa de la Liga mucho más emotiva. Y mucho más tensa, claro.
Si Boca pierde, sumado al flojo presente en la Copa Libertadores y a que el equipo no tiene funcionamiento desde hace rato, Russo deberá renunciar. Tendrá que dar un paso al costado por no tener la capacidad (en este momento) de llevar el barco por aguas serenas ni de maniobrar rápidamente cuando la cosa se pone turbia.
Sería un nuevo golpe para Boca el ser eliminado por River. Claro, pobre Miguel, el historial viene desde antes de su regreso al club, pero su presente tampoco le da tanta espalda como para soportar semejante trompada. Si pierde, nos vemos.