La marcha de Zidane, la crónica de la muerte anunciada de una leyenda merengue
Por Pablo Falcones
Se acaba de hacer oficial. Zinedine Zidane deja de ser entrenador del Real Madrid de cara a la próxima temporada. Una noticia que se podía intuir con las declaraciones que había ido dejando el francés en las últimas semanas.
Lo cierto es que es una lástima para el club blanco en varios sentidos. Zizou había llegado hace un poco más de dos años para sacar al equipo de una crisis tremenda, y la verdad que lo había conseguido. La liga y la Supercopa del año pasado rompían su sequía, que duraba desde que el propio Zidane hubiera logrado la Decimotercera Champions justo antes de su primer adiós, contra el Liverpool (3-1).
Aún así, hay diferencias con el adiós del año 2018. En aquel momento todo fue más sorpresivo, mientras que en esta ocasión sí que cabía esperar una marcha del galo. Ser entrenador del Real Madrid tiene un desgaste bestial. Nadie en muchísimo tiempo ha durado más de tres temporadas, y Zidane lo ha hecho en dos ocasiones.
Zidane además había logrado lo que nunca antes un entrenador del Real Madrid: tener crédito. Salvó un match ball muy importante en diciembre, cuando estuvo cerca de quedarse eliminado en fase de grupos de la Champions. Pero sobre todo, si él hubiera querido habría podido seguir a pesar de no haber ganado ningún título. Algo inaudito en este club.
Personalmente, creo que lo que ha logrado el galo esta temporada es plausible. El equipo le trajo fichajes hace dos veranos importantes, pero sólo han funcionado Mendy y al final Militao. Ni Rodrygo, ni Jovic, ni Kubo (cedido) ni sobre todo Hazard han dado un salto de calidad a la plantilla. Este verano sólo llegó Odegaard y lleva ya medio año en el Arsenal.
Quizá el propio Zidane tuviera algo que ver en ello, pero al final ha arado con los bueyes de siempre. Lo cierto es que es complicado ganar sin renovar bien a un equipo y Zizou ya lo hizo el año pasado y casi lo logra en este. Se marcha el segundo entrenador con más títulos del club (11) y segundo con más victorias (174), sólo por detrás de Miguel Muñoz.
En definitiva, Zizou ya fue una leyenda como jugador, y en esta segunda etapa como entrenador ha aumentado la suya como técnico. Pero su marcha no es más que la crónica de una muerte anunciada.