"La Decisión" de Setién fue humillar a Griezmann

FC Barcelona v Borussia Dortmund: Group F - UEFA Champions League
FC Barcelona v Borussia Dortmund: Group F - UEFA Champions League / TF-Images/Getty Images
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120 millones de euros y un documental sobre su decisión de marcharse o no del Atlético de Madrid, fueron los causantes de la llegada de Griezmann al FC Barcelona. El año pasado, en el Camp Nou, Griezmann se plantaba en un partido entre blaugranas y rojiblancos siendo la esperanza de los de Simeone para sacar los tres puntos, ayer, ya siendo jugador culé, vio todo el partido desde el banquillo salvo el descuento. De crack a estrellado. De ícono del equipo y protegido del que era su entrenador a humillado por el que ahora le dirige.

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FBL-ESP-LIGA-BARCELONA-ATLETICO MADRID / LLUIS GENE/Getty Images

Que a Messi no le cae bien el francés es algo que todos sabíamos. Su llegada fue la causa de que Neymar, el eterno amigo de Lionel, no volviese al Camp Nou. Pero lo que nadie esperaba es que el entrenador al que nadie respeta en ese vestuario tuviese la energía de derribar a Griezmann. Darle plantón en un partido importantisimo y no tener reparo en ello. Setién, al que le tienen por un mero entrenador de paso, sacó la poca energía que le queda para señalar a Antoine. Me van a permitir citar una frase de su mujer en el documental en el que el francés anunciaba su primera "Decisión" (que en este caso fue quedarse en el Atlético de Madrid): "allí serás uno más siempre", y vaya si lo es. Bueno, de hecho no es uno más, es uno que está por estar. Llegó este verano y ya se habla de su salida por bajo rendimiento. Cuánto frío hace lejos del Metropolitano... ¿Qué pensaría el Cholo cuando le vio entrar en el minuto 90? se me hace imposible no creer que, pese al cariño que le profesa, algo dentro de él no se alegró. No por que se marchase, sino por cómo lo hizo.

Setién, que no va a seguir la temporada que viene en el Barça, ha gastado la poca energía que le queda en humillar a Griezmann. Lo de ayer no es un mensaje a nadie, es un intento de demostrar autoridad atacando al eslabón más débil. Griezmann, por su parte, imagino que ya no se sorprenderá. No le ha venido ninguna a derechas desde que empezó el año. C' est la vie, Antoine.