"Hoy te conviertes en héroe": el Papu Gómez tiene una cita con la historia
Cuando el reloj marque las 20 horas en Lisboa, el Atalanta de Gian Piero Gasperini jugará el partido más significativo de su historia: disputará los cuartos de final de la Champions League, nada menos que ante el París Saint Germain de Francia.
Si hace algunos años le contábamos a Alejandro "Papu" Gómez que a los 32 años sería el conductor de un humilde equipo de Italia y que se enfrentaría en semejante instancia al millonario equipo francés, cuya estrella cobra en un año lo mismo que el plantel entero de Bérgamo, probablemente se hubiera reído a carcajadas tratándonos de locos.
Pero el fútbol es tan mágico porque tiene estas sorpresas: así como está lleno de frustraciones ya que en general se pierde más de lo que se gana, también te premia de vez en cuando, y el "Papu" quiere seguir disfrutando las miles del éxito.
Todos hablan del equipo sensación que sorprendió al mundo. Y cuando hablan del Atalanta, el primer jugador que se les viene a la cabeza es el pequeño gigante argentino, porque hace todo: marca, asiste, da una mano en la recuperación, es solidario.
La vida le volvió a sonreír al chico de Avellaneda que en 2014 debió escaparse junto a su familia del Metalist de Ucrania, por la guerra que se desató en dicho país: no podían ni ducharse ni cocinar por el agua contaminada, razón por la que su esposa Linda entró en una profunda depresión.
El planeta futbolero quiere que gane Atalanta. Desea que el equipo humilde derrote al poderoso, no solo por la enorme diferencia de presupuesto, sino sobre todo debido al sello que están dejando en el deporte más popular del mundo, demostrando una vez más que una idea de juego bien llevada a cabo y con compromiso vale más que cualquier billetera.
El "Papu" sabe que todos los flashes lo apuntarán a él. Y, seguramente, él conviva feliz con esa responsabilidad, ya que jamás renegó de ser el conductor del Atalanta.
Se seguirá encargando de brindar asistencias (nadie sirvió tantos goles como él en la Serie A durante los últimos 15 años), de nutrir a Duvan Zapata, Luis Muriel e Ilicic, de hacer la doble función de ayudar en el mediocampo y participar en el último tercio de la cancha.
Sin embargo, a los grandes jugadores siempre se les exige un poco más. Entonces, la frase que Javier Mascherano le pronunció a Sergio Romero para la Selección Argentina en el Mundial Brasil 2014, antes de los penales ante Holanda, bien podría trasladarse al vestuario de los de Bérgamo.
"Hoy te convertís en héroe, Papu". Para seguir haciendo historia con el equipo sensación de Europa. Para seguir desafiando a la naturaleza, ya que al contrario de la mayoría su nivel es superior conforme pasan los años. Para que el fútbol vuelva a sumar una de esas hazañas hermosas. Es hoy.