El Real Madrid luchará contra la 'maldición de las 18.55' este miércoles ante el Shakhtar
Por Pablo Falcones
Hasta la temporada 2017/18, todos los partidos de Champions League se disputaban a las 20.45 (menos en Rusia). Esa era la hora de la competición, la del himno, un número grabado a fuego en la mente de todos los aficionados de este deporte. Desde hace 2 años se cambiaron los horarios y ahora hay 2 turnos: uno a las 21.00, en el que se juega el grueso de cada jornada, y otro a las 18.55, en el que cada día hay 2 partidos, 4 por jornada en total
Pues bien, mañana contra el Shakhtar Donetsk el Real Madrid abrirá su edición de esta Champions precisamente a las 18.55. Un horario en el que los blancos han tenido que jugar hasta el momento dos veces. Una en la temporada 2018/19 y otra el año pasado. Ambas fueron en el Santiago Bernabéu, y las dos son de infausto recuerdo para los madridistas.
En la primera ocasión. Solari se sentaba en el banquillo blanco. Había cogido al equipo tras un comienzo desastroso de Lopetegui que acabó con el vasco despedido después de una goleada en el Camp Nou ante el Barcelona (5-1). El Real Madrid ya había certificado su clasificación a octavos de final y se enfrentaba al CSKA de Moscú, de largo el peor equipo del grupo. No se jugaba nada, a priori.
La imagen que dio el equipo español fue muy triste. Los rusos pasaron por encima de los locales y les barrieron por 0-3, con un gran Sigurdsson. Por eso pasó de no jugarse nada a decepcionar a la afición. Quizá sí que tenía mucho que perder. Sobre todo quedó muy tocada la imagen del equipo. Era la mayor goleada recibida en competición europea por el club en su historia, aunque en marzo el Ajax subiría el listón (1-4)
El año pasado fue el Brujas el equipo que visitaba el Bernabéu a esa hora. De nuevo el equipo más flojo del grupo, pero en la segunda jornada. El equipo de Zidane venía de haber sido goleado por el Paris Saint Germain en el primer partido con un Di María estelar (3-0). Era una ocasión muy buena para enderezar el rumbo, pero las cosas se les torcieron desde el principio.
Dennis destrozó a los blancos en la primer parte, con un doblete sensacional y frente a un Courtois horrible que fue sustituido al descanso. En la reanudación el Real Madrid salvó un poco los muebles y con goles de Casemiro y Ramos pudieron rescatar un punto, pero la imagen de nuevo quedaba muy dañada y además se comprometía la clasificación. A la larga lo pagó, pues sólo pudo ser 2º tras el Paris Saint Germain y tuvo que enfrentarse a un 'coco' como el Manchester City y con la vuelta fuera de casa. Resultado: otra vez eliminado en octavos (1-2 y 2-1)
Zidane espera que a la tercera vaya la vencida. El rival es otra vez el más asequible del grupo, aunque su nivel es más alto que el de los dos años anteriores. Por si fuera poco, el equipo también viene de un fin de semana complicado después de un partido flojísimo ante el Cádiz que supuso la primera derrota desde marzo en liga (0-1). Al Real Madrid le queda el 'consuelo' de que al menos esta vez no se jugará en el Bernabéu, sino que se disputará en el Alfredo Di Stéfano. Allí, y sin público en las gradas, esperan romper a la tercera la 'maldición de las 18.55'