El partido de España contra Holanda debe servir para continuar con las pruebas
Por Manuel Navas
Vuelve el fútbol de selecciones y para el caso de la selección española, lo hace viéndose las caras en Johan Cruyff Arena contra la selección holandesa. Un partido que, pese a su carácter amistoso, debería servir para que el seleccionador saque más ideas de cara a los dos encuentros de la UEFA Nations League frente a Suiza y Alemania.
Si por algo se ha caracterizado Luis Enrique en sus dos etapas al frente del combinado nacional, ha sido por introducir cambios e, incluso, rectificarlos de un día para otro - solo hay que recordar la no llamada, allá por 2018, de Iago Aspas para días después situarlo como titular -, a fin de buscar un estilo de juego más agresivo, más acorde a la tendencia actual, sin renunciar del todo a la esencia de juego que ha caracterizado a la selección en los últimos años.
El test contra Holanda debe servir para eso, para medir los últimos cambios e introducir más novedades ante un rival complicado, aprovechando el buen momento de varios jugadores. La selección llevaba meses sin un delantero a nivel TOP, ahora que Álvaro Morata está en un momento dulce, podría ser titular y apunta a ello. Como también apuntan a titulares dos jugadores que actuaron bien en octubre como son Mikel Merino o Adama Traoré.
La sensación es que ya se anda por el buen camino. Del último parón se sacaron algunas conclusiones positivas - más respecto a juego que por resultados -. Conclusiones a las que ahora toca darle continuidad pese a los inconvenientes, como la lesión de Ansu Fati para los próximos meses, sin renunciar a los cambios. La idea parece firme, hay que llegar de la mejor forma posible a la próxima Eurocopa.
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