El mal momento de Cruz Azul es culpa de TODOS y nadie se salva

Cruz Azul v Tijuana - Torneo Apertura 2022 Liga MX
Cruz Azul v Tijuana - Torneo Apertura 2022 Liga MX / Francisco Vega/GettyImages
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Tres derrotas consecutivas, la última contra Tijuana por marcador de 2-1 en casa, habla muy poco de lo que realmente está pasando en Cruz Azul.

La Máquina está en uno de sus peores arranques en torneos cortos de la historia. Claro, esto es consecuencia de una pésima planeación de la directiva de cara al Apertura 2022, pero ese pretexto también tiene que terminar para las demás partes de la institución.

Primero, está claro que Diego Aguirre no ha encontrado su alineación titular, pues los cambios son constantes y en ocasiones se ha sentido que hasta está "inventando" o poniendo cosas que a la afición hacen sentido. El ejemplo claro es que Michael Estrada, quien apenas llegó hace unos días al club, fue titular ante Xolos. No es nada contra el delantero, pero el sentido común podría indicar que como recién fichó, aún no conoce del todo bien el plan de juego.

Michael Estrada
Michael Estrada con Cruz Azul / Jam Media/GettyImages

Por supuesto, Estrada no tiene la culpa. Intentó, peleó pero es sumamente complicado ser un atacante con más relevancia con apenas unos días en el equipo. Además, teniendo a opciones como Gonzalo Carneiro, que fue petición explícita del entrenador, saltó más a la sorpresa la titularidad del ecuatoriano.

Sumando a esto, el nivel de la plantilla raya en los triste. La defensa es la peor de la Liga MX a pesar de que en nombres podría pensarse lo contrario. El ataque, tras la salida de Santiago Giménez, quedó completamente deshabitado y no hay quien tome las riendas. Y, finalmente, el medio del campo tiene a Charly Rodríguez, Erik Lira y demás figuras en bajo nivel.

Esto, más lo que ya todos sabemos sobre el pésimo trabajo hecho por Jaime Ordiales y compañía, tienen a Cruz Azul en el lugar 16 de la tabla general con apenas ocho puntos.

En la Noria, para la tristeza de los aficionados, nadie se salva. Lo peor de todo, es que no se ve una luz al final del camino y todo indica que esta situación no va a cambiar.