Sin Griezmann al 100% al Barcelona le va a ser muy difícil cumplir sus metas esta temporada
Por Estefanía Ramos
El FC Barcelona tan sólo ha disputado un solo partido en este regreso de LaLiga y le ha ido bastante bien. El encuentro ante el Mallorca invita al optimismo: el equipo logró una contundente victoria, los jugadores apenas han notado el parón con actuaciones notables y un juego coral que se va asemejando a lo que están acostumbrados en el Camp Nou, Messi sigue siendo Messi y Luis Suárez reapareció tras la lesión. Pero en medio de esta burbuja de felicidad Antoine Griezmann sigue estando en su mundo.
El francés fue clave en un par de acciones transcendentales para el resultado del partido y en defensa se sacrifica como uno más del equipo, pero su aportación acaba ahí. En ataque es un jugador errante sin apenas protagonismo y sigue mostrando la misma cara gris y apática que en el resto de la temporada. Este Griezmann de poco le sirve al FC Barcelona. El Barça necesita que su jugador esté al 100% sobre el terreno de juego, que marque goles, reparta asistencias y participe activamente en el juego. A los azulgranas les quedan diez partidos a vida o muerte para ser campeones de Liga, diez partidos en los que no pueden fallar y en los que las rotaciones prometen ser protagonistas. Quique Setién necesita a todos sus jugadores en forma y si encima eres una de las estrellas del equipo tu aportación debe ser notable.
Una cosa es llegar a un equipo plagado de estrellas en el que tú ya no eres el líder y tienes que adoptar un papel secundario, y otra vagar sin rumbo por el terreno de juego y sin aportar al juego del equipo.
Griezmann no termina de encontrar su sitio en el FC Barcelona. Todavía le falta dar ese paso para ser el Griezmann que deslumbró en el Atlético de Madrid y lo sigue haciendo en la selección francesa. El Barça le fichó para tener la mejor delantera del mundo y su aportación en lo que llevamos de temporada está lejos de ser la de uno de los cracks mundiales. El jugador francés ha estado desaparecido en muchos partidos a lo largo de este curso y un futbolista de su talla tiene que dar un paso al frente y sentirse protagonista, con permiso de Leo Messi. Durante parte de la temporada el crack argentino ha sido el pilar que ha sostenido al equipo pero cuanta más ayuda reciba de sus compañeros mejor para él y mejor para que el equipo, y Griezmann está en el FC Barcelona para eso, para ser un complemento, un socio de Messi y de Suárez. Y con el uruguayo todavía a medio gas el equipo no se puede permitir el lujo de que uno de sus puntales esté desaparecido en combate.
La mejor versión de Griezmann aún no la hemos visto en el FC Barcelona y se le acaba el tiempo para mostrarla. No sólo porque su continuidad puede estar en el aire, sino porque el final de temporada no da un respiro y todos los jugadores tienen que estar y tienen que aportar. Cuando Griezmann está en forma ya hemos visto que él sólo es capaz de ganar partidos y eso es lo que necesita el Barcelona, ganar todos los partidos que le restan para ser campeón y para ello tiene que utilizar todas sus armas, incluido el francés.
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