El Barcelona tiene la obligación de facilitar la salida de Messi
Por Pablo Falcones
El tema de la semana en el mundo del fútbol, por supuesto, es la marcha de Messi del Barcelona. Desde que el miércoles el argentino enviara un burofax comunicándole al club su deseo de abandonarlo no se han parado de suceder los rumores, noticias y especulaciones en torno al asunto.
El conjunto azulgrana no ha asumido aún el deseo de su estrella, no se lo quiere poner fácil y aunque Leo intentará llegar a un acuerdo amistoso en los próximos días con la entidad, todo hace indicar que el asunto no se resolverá fácilmente e incluso que puede ir para largo. Desde mi punto de vista, en este sentido el Barcelona se equivoca.
Sí que es verdad que la noticia es durísima para directivos, staff técnico y aficionados del equipo, pero creo que a Messi se le debe proporcionar todo lo que pida. Si echamos la vista atrás, este jugador ha cambiado para siempre la historia del FC Barcelona. Hay un Barcelona antes y después de Messi, que en estos 16 años lo ha colocado en un nivel del fútbol mundial en el que no había estado nunca. En la cima de este deporte.
También es verdad que la situación económica y deportiva del equipo no es la mejor, pero esto viene pasando desde hace años. No es una cosa que haya llegado solo tras el fiasco de la Champions ante el Bayern Múnich. Messi no tiene la culpa en absoluto, ni siquiera por ser el jugador mejor pagado del mundo. De hecho, sin Messi este descalabro habría sido mayor y habría llegado mucho antes,
Como club caballero que debería ser, y teniendo en cuenta que es imposible que alguien haya dado más a la entidad que Messi, lo correcto sería dejarlo marchar en las condiciones que él pidiera. Seguro que él es el primero al que no le gustaría tener que despedirse así, pero siente que ha llegado su hora. Las comparaciones son odiosas, pero viendo cómo se marcharon otras leyendas del club (Xavi, Iniesta, Mascherano,...) a Messi se le deben de empañar los ojos de lágrimas.
Incluso yendo al eterno rival, el Real Madrid, se podría tomar como referencia la despedida de Cristiano Ronaldo. Fue breve, sin alardes, pero el club se la facilitó en todo momento. No se le guarda ningún rencor en el Bernabéu precisamente porque, al igual que Messi con el Barcelona, dio todo lo que tenía por el equipo en su etapa allí. Ahora es el momento de que los azulgrana tomen nota y sigan esos ejemplos. Por el bien de todos.