EL BARCELONA NO TERMINA DE DESPEGAR | Entra Coutinho, sale Lenglet: el cambio de la vergüenza
Enésimo ridículo del Barcelona, esta vez contra el Valencia. Los chés no pasan por un buen momento y miran con temor a los puestos de descenso, pero pusieron en aprietos al Barcelona y merecieron ganar. Koeman debió advertir el peligro porque, inexplicablemente, a falta de un cuarto de hora de partido, retiró a Coutinho del terreno de juego para sacar a Lenglet. ¿Un refuerzo defensivo para conservar el empate?
Nadie entiende los planteamientos de Ronald Koeman. El Barcelona funcionó con Braithwaite en punta y de golpe y porrazo, colocó un 1-4-3-3 y lo mandó a la banda izquierda. Recuperó al danés en la punta en la segunda mitad contra el Valencia y los blaugranas crearon peligro… hasta que quitó a Griezmann, hizo entrar a Trincão y volvió a mover a Braithwaite.
La sustitución de Trincão por Griezmann es una más de las incomprensibles. Koeman asegura confianza en el francés, pero le castiga siempre como el primer o segundo cambio, sin importar cómo esté jugando él o sus compañeros. Para colmo, la sustitución es por Trincão. El luso ha jugado 17 partidos y no ha producido absolutamente nada. Hizo lo propio contra los chés. Su jugada más destacada fue un paseo por la frontal, de una banda hasta la otra. Driblar balones para no buscar posiciones de disparo ni filtrar un pase al interior del área. Conducción peligrosa con el objetivo de ceder en corto al lateral.
Los cambios desequilibraron al equipo y el Valencia tuvo premio. Gayà superó a Pedri por la banda porque Dest pensó que él jugaba de extremo. Puso el balón al corazón del área pequeña y Maxi remató con mucha categoría. El tanto asustó a Koeman, que debe pensar que los blaugranas tienen un colchón de puntos con su objetivo (empiezo a pensar que se ha propuesto evitar el descenso), y mandó intensificar el calentamiento de Lenglet.
Coutinho se movió a la banda izquierda y creó. Realizó una conducción hacia el lateral del área y disparó al segundo palo. El balón salió fuera por muy poco, rozando el palo. El siguiente en salir fue él. Entró Lenglet. Koeman decidió que era el momento de plantear una defensa de cinco.
El Barcelona consiguió el empate contra el Valencia. Vuelve a alejarse de la cabeza de la tabla. Koeman coge la pala para cavar su propia tumba y se libra de la rescisión por el vacío en la presidencia del Camp Nou. Messi iguala a Pelé como el jugador con más goles en la historia en un solo club en la tarde más triste. Los blaugranas tocan fondo otra vez y ya van…