El Barcelona busca un segundo portero para suplir la salida de Neto

Aitor Fernández en el Camp Nou
Aitor Fernández en el Camp Nou / Quality Sport Images/Getty Images
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La salida de Neto para liberar masa salarial parece un hecho y el Barça necesitará un segundo portero de cara a la próxima campaña. El club cuenta con buenos porteros en el filial pero no se le quiere otorgar una excesiva responsabilidad a quien aún no está preparado.

El guardameta brasileño gusta en Italia, lugar donde más ha destacado a lo largo de su carrera. Además el Barça está empeñado en buscarle otro equipo y conseguir que el portero que le sustituya tengo una ficha muy inferior. Hasta el momento han surgido tres nombres con cierta lógica:

En primer lugar tenemos el de Jordi Masip: la ventaja de traer a Jordi de vuelta al Camp Nou es que conoce a la perfección cómo funciona el equipo y ha demostrado ser un portero fiable en primera división. Su club, el Valladolid, acaba de descender a segunda y es muy posible que Masip no se conforme con jugar en la segunda categoría del fútbol español. Es un portero muy hábil pero tal vez peca de exceso de confianza en algunas ocasiones lo que le lleva a cometer errores de bulto que suelen costarle caro a sus equipos. Cuando tiene el día es uno de los mejores porteros de la liga.

La segunda opción es Aitor Fernández. El portero del Levante fue el guardameta que más paradas realizó en la temporada 2019-2020. En esta campaña su importancia ha ido a menos llegando a perder el puesto durante la segunda vuelta en favor de Dani Cárdenas. El jugador no vería con malos ojos pasar de ser el suplente del Levante a ser el suplente de todo un Barcelona. El precio de su fichaje sería incluso menor que el de Jordi Masip ya que en el caso del Valladolid se estaría deshaciendo de su portero titular.

La última opción es Iñaki Peña. En el equipo no se duda de su inmensa calidad y se considera que seguramente sea un miembro importante en el futuro de la entidad, pero tal vez en estos instantes no esté preparado para asumir esa carga de responsabilidad. Quizás en un par de temporadas ya esté listo para dar el definitivo salto al primer equipo.