Cristiano Ronaldo debería saber que el equipo es más importante que la foto
Milagro en Italia. La todopoderosa Juventus, el equipo que lleva años y años en lo más alto y arrasa contra todo equipo que se cruza a su paso, cayó ante el Nápoles en la final de la Copa de Italia. Los del sur de Italia ganaron el título y los del norte no han tardado en buscar culpables. Tampoco les ha sido muy difícil señalar al blanco de sus iras: Cristiano Ronaldo. El luso no solo no hizo un buen partido, sino que no pateó ningún penalti. Quiso esperar al quinto para ser él quien ganara el partido. No fue así.
Cristiano Ronaldo gusta mucho de colocarse como el quinto lanzador. Algunos afirman que esta es la posición de los valientes. Si fallas y el rival marca todos, haces a tu equipo caer. Sin embargo, la quinta posición es algo más que todo eso. Ser el lanzador del último penalti también significa ser el héroe, el futbolista al que van a sacar todas las cámaras celebrando el gol. El luso nos ha dejado demasiadas celebraciones con el Real Madrid como para pensar que su objetivo es este último y no el de cargarse el equipo a la espalda.
Esta teoría, elucubración, maldad es pensada por muchos de los habitantes del norte de Italia y por qué no decirlo, también por muchos de los futboleros que, inevitablemente, han seguido la historia de fútbol y marketing del 7 portugués. Nadie se asustaría por pensar que Cristiano deseaba tirar el penalti solo para quitarse la camiseta y mostrar sus lucidos abdominales, cuidados durante el confinamiento, una vez más.