Bartomeu ya no puede tapar sus errores
Por Juanjo Tovar
El presidente del Barcelona se niega a dimitir. Tras firmar la peor temporada de la década y confirmarse el deseo de Leo Messi de salir del club, Bartomeu sigue firme en su idea de seguir al mando del barco culé.
Bartomeu no quiere dejar de presidir la directiva del FC Barcelona. Para muchos, ya es el peor presidente de la historia del club y para los pocos restantes que tienen dudas, estas se disipan cada día más en su contra. La marcha de Leo Messi puede ser la estocada definitiva para Bartomeu. La salida del mejor jugador del mundo y de la historia del club sería una mancha imborrable para el Barcelona.
La imagen del equipo esta temporada ha sido lamentable. También, las sensaciones y los resultados en competición europea han sido catastróficos en los últimos tres años. Y es que en lo deportivo, la era Bartomeu ha tenido muchos altibajos. Sin embargo, lo que principalmente castiga al presidente del Barça no es lo deportivo, si no lo institucional. La gestión de los temas de oficina y de mercado han destapado la mala organización de la directiva culé. El tema Neymar abrió la herida de una directiva, que desde entonces no ha logrado cicatrizarla como es debido.
Los fichajes, las polémicas salidas, el desprestigio a la plantilla y las miles de desafortunadas declaraciones a la prensa, han ido cavando un hoyo para el presidente. Ahora, el agujero es muy grande y ya no se puede tapar.
Ahora, Bartomeu vive la peor semana al frente del Barcelona. Una semana que debería culminar con su dimisión. Al presidente se le acaban los apoyos, ni la plantilla le sustenta ni la afición le apoya. En la directiva azulgrana deberían asumir responsabilidades. El club esta por encima de cualquier jugador, pero también por encima de cualquier presidente.