El Barcelona le queda muy grande a Luuk De Jong

Cuando eres el delantero de un club como el Barcelona, todas las miradas están puestas en ti. Si además te ha tocado 'heredar' uno de los huecos que ha dejado Messi en la plantilla este verano, la presión que recae sobre uno es tremenda. Algo parecido debe de estar sintiendo en este comienzo de temporada Luuk De Jong.

El holandés llegó a última hora (literalmente) este verano, procedente del Sevilla. Una operación que también acabó con Griezmann en el Atlético de Madrid. Por cierto, otro delantero que aunque no terminara de cuajar del todo, dio más rendimiento que el holandés. Porque hasta el momento está demostrando que el Barcelona le queda grande.

Al principio no se entendía mucho su fichaje. Él es un delantero poco móvil, rematador y que en España nunca se ha caracterizado por ser goleador. De hecho, era suplente de En-Nesyri en el Sevilla. Un En-Nesyri que compartía delantera en el Leganés...¡¡¡con Braithwaite!!! Pero eso daría para otro artículo.

Su principal aval en el club es Koeman, que lo conoce del PSV y de la selección holandesa. Un Koeman cuyo puesto lleva meses en entredicho y que parece que estará mucho tiempo en la cuerda floja. Un Koeman que, hasta el momento, está dándole al bueno de Luuk toda la confianza que puede.

De momento, no está demostrando demasiado. Ha jugado 387 minutos repartidos en 7 partidos este curso y apenas ha marcado 1 gol, en la goleada frente al Levante (3-0). Es muy poco bagaje para un delantero del Barcelona. Ayer ya fue silbado por parte del público del Camp Nou y ha fallado varios goles cantados este curso. Ni siquiera le salen los remates de cabeza, que era uno de los puntos fuertes en los que lo defendió Koeman.

En un puesto por el que han pasado Luis Suárez, Henry, Larsson, Villa, Eto'o o hasta el propio Ibrahimovic en los últimos 15 años, el listón está altísimo para un jugador como Luuk de Jong. Tiene pinta de que este año lo va a pasar bastante mal.