El Barça logra tres puntos importantísimos en un aburrido partido frente al Alavés
Soporífero partido de fútbol que termina cayendo del lado de los culés después de noventa minutos difícilmente empeorables.
Ese paso hacia delante que se observó contra el Real Madrid y durante tramos del partido frente al Athletic club parece haber desaparecido por completo de nuevo. Un equipo como el Alavés que deja que llegues con facilidad a la frontal era el rival perfecto para que el Barça demostrase que había mejorado en el ritmo de la circulación de pelota en metros finales. Nada más lejos de la realidad.
El resumen del partido es sencillo. Una primera mitad que si por algo destacó fue por la ausencia de ocasiones, y una segunda parte en la que primero Luuk De Jong y segundo Joselu mandaron al limbo dos jugadas de peligro. El choque era un claro ejemplo de lo que es un justo 0-0, pero una buena jugada elaborada entre Jordi Alba y Ferran Torres acabó con un gol importantísimo para el Barça firmado por Frenkie De Jong.
Los puntos son una noticia excelente para el Barcelona que ve como se queda a las puertas de los puestos Champions.
El equipo tiene que comenzar a ganar partidos por defecto y evitar por todos los medios esos empates tontos que tanto han acompañado al equipo culé a lo largo de la presente campaña.
Siempre se ha destacado en can Barça que uno de los principios fundamentales del club es que no solo importa ganar, pues el cómo se gana es prácticamente igual de importante que el triunfo en sí. Hoy no es un día para presumir en ese aspecto.
Sería conveniente para el Barça que este gol permitiese a Frenkie De Jong recuperar la confianza en sí mismo, pues nadie duda de que es un jugador que cuenta con unos registros y una calidad al alcance de muy pocos, pero su déficit de confianza le está impidiendo sacar a paseo todo su potencial.