Las 10 debilidades que justifican el mal comienzo de temporada del Barcelona
Por Pablo Falcones
El Barcelona 2021-22, el Barcelona post Messi, está mal. Está muy mal. Marchan 9º en liga, en Champions van 3º con dos derrotas en tres partidos y hace apenas 48 horas perdieron su cuarto Clásico seguido contra el Real Madrid (1-2). Estos son los puntos donde más flaquea el equipo de Koeman:
10. Debilidad defensiva
La defensa del Barcelona siempre ha sido su punto menos fuerte. Este año se nota más su debilidad, ya que el equipo ha perdido mucho poder. Apenas han acabado 4 de los 12 partidos que llevan disputados sin encajar gol y dan una gran sensación de inseguridad.
9. Falta potencial en ataque
El ataque es otro de los problemas del Barcelona. 16 goles a favor en esos 12 encuentros, con 1 apenas en 3 duelos de Champions, son un bagaje muy pobre para un equipo de tanta entidad. El nivel de los delanteros este año, tras la marcha de Suárez, Messi y Griezmann en los últimos 13 meses, es alarmante
8. Asolados por las lesiones
Como las desgracias nunca vienen solas, este año las lesiones están afectando más si cabe a la plantilla culé. Frenkie de Jong ha sido el último en caer en una lista en la que siguen Araújo, Pedri, Wagué y Braithwaite. Lo de Dembelé ya no sorprende a nadie. Al menos han vuelto después de mucho tiempo Agüero, que marcó en el Clásico, y sobre todo Ansu Fati.
7. Los fichajes no terminan de arrancar
Lo cierto es que no tenían mucho margen de maniobra, pero los fichajes que ha hecho este año el Barcelona no terminan de explotar. Agüero al menos marcó, pero apenas ha jugado 3 ratitos en este curso. Luuk de Jong ya se le ha cruzado a la grada, Eric García aún está muy verde y Depay no es Messi. Le falta un poco de regularidad.
6. No hay sintonía con Koeman
Está claro que la química entre Koeman y los jugadores es nula. El holandés ha empezado bastante mal esta temporada y lleva meses en la cuerda floja. Lo mejor que ha hecho es de continuidad a los jóvenes, pero las 'vacas sagradas' no parece que estén muy de su lado. Además no le acompañan los resultados
5. Los cracks están por debajo de su nivel habitual
Será el sistema, será el entrenador o serán los jugadores. Lo que es innegable es que hay muchos futbolistas cuyo rendimiento en el Barcelona está lejos del de otros años o sobre todo, del de su selección. De Jong, Busquets, Ter Stegen, Sergi Roberto, Piqué o incluso Jordi Alba son algunos ejemplos de jugadores que son una sombra de lo que fueron
4. Plantilla demasiado joven
Lo de los jóvenes es como lo de la manta corta. Llenan de ilusión y de savia nueva al grupo y a la afición, pero les falta 'mala leche'. Al final, es complicado que jugadores de apenas 17, 18 o 20 años puedan aguantar tanta presión, por muy buenos que sean. Es la parte mala de ser un chaval en un club tan mediático como el Barcelona, donde todo se mira con lupa
3. Falta de un líder claro
En el Real Madrid está Benzema, en el Atlético de Madrid está Simeone,...¿quién se echa el Barcelona a la espalda? Lo cierto es que se echa de menos un referente, sobre todo a nivel espiritual, en un equipo que ahora mismo marcha a la deriva. No hay alguien carismático ni en el campo ni en el banquillo.
2. Nulo potencial ante los equipos grandes
El Bayern y el Benfica destrozaron al Barcelona en Champions (3-0 y 0-3), el Atlético le dio un repaso táctico y ofensivo en la primera parte en el Wanda (2-0) y el otro día el Real Madrid le ganó con suficiencia sin hacer un partido excelso. Menos mal que el duelo contra el Sevilla fue aplazado. El Barcelona de Koeman está demostrando desde hace tiempo que le falta el nivel que solía tener en los partidos más decisivos de la temporada.
1. Sigue la tensión institucional
A nivel presidencial y de puertas hacia dentro en las altas esferas del club, la tensión aún no se ha ido del todo. Los resultados no ayudan, la situación económica aprieta y el tiempo juega en contra de todos. Sobre todo de Laporta, al que esta semana le han 'crecido los enanos': las declaraciones de Bartomeu, la Asamblea en la que se libró por los pelos, la situación delicada de Koeman,... todo está muy caliente en Can Barça